Un "carnaval" de candidatos insólitos

RIO DE JANEIRO (De nuestro corresponsal).- Todavía faltan seis meses para el siempre colorido carnaval brasileño, pero la campaña electoral en este país ya hace desfilar por Internet y los espacios gratuitos de radio y televisión a una variopinta serie de candidatos que, apelando al sexo, el fútbol, la música y los nombres graciosos, buscan atraer a los votantes.

La competencia es dura: más de 20.000 personas aspiran a algún cargo en los comicios del 3 de octubre, cuando, además del presidente, los brasileños elijan a los 27 gobernadores del país, a sus 513 diputados, a 27 de los 81 senadores y a miembros de las asambleas legislativas regionales. Muchos son políticos veteranos -como el ex presidente Fernando Collor de Mello, que busca la gobernación de Alagoas-, pero miles de otros se lanzan por primera vez a la arena política. Entre los candidatos, hay ex participantes de Gran Hermano , ex prostitutas, deportistas, y otros de apodos insólitos.

La delantera de la selección brasileña que ganó el Mundial de fútbol de 1994 compite ahora por sufragios: Romario como candidato a diputado federal por el Partido Socialista Brasileño (PSB), mientras que Bebeto busca ser elegido como diputado regional del estado de Río de Janeiro por el Partido Democrático Laborista (PDT, por sus siglas en portugués). Otro ídolo deportivo, el ex boxeador Acelino Freitas ("Popó"), confía en que sus títulos mundiales lo ayuden a ganar una banca en la legislatura de Bahía por el Partido Republicano Brasileño (PRB).

Y como las leyes electorales en Brasil permiten que un candidato elija un nombre distinto del suyo para que figure en la boleta electoral, hasta hay un "Maradona de Brasil", alias con el que se presenta Gilberto de Castro Carmo. Con su parecido físico con Diego Armando Maradona, confía en convertirse en diputado federal por el Partido Laborista Brasileño (PTB).

Si de atractivos físicos se tratase, el falso Maradona la tiene muy difícil frente a la candidata a diputada federal por el Partido Laborista Nacional (PTN), Suéllem Rocha, una sexy bailarina de cabaret que, si bien era conocida como la "gatinha del funk", eligió como marca política el apodo de "Mujer Pera".

"Elegí la imagen de la pera porque tengo cintura fina y cuadril grande", explicó la popular joven, que nunca se presenta sin su ajustadísimo vestido verde pera. Siguiéndole los pasos por la frutería, está Cristina Célia Antunes, autobautizada como la "Mujer Melón", por sus obvios atributos delanteros con los que deleita a los seguidores del Partido Humanista de la Solidaridad para ser diputada estatal en Río de Janeiro.

Ya con la experiencia que le dan los años, y con una campaña mucho más directa que la de estas mujeres, se presenta la ex prostituta Gabriela Leite, de 58 años, con el lema de "Una puta diputada". Desde la banca a diputada federal a la que aspira por el Partido Verde pretende promover iniciativas que terminen con los prejuicios contra las profesionales del sexo.

En la misma tónica se presenta la ex "garota de programa" Andréia Schwartz, que se hizo conocida en 2008 cuando reveló al FBI los pormenores de la relación que tenía una de sus compañeras, Ashley Dupré, con el entonces gobernador de Nueva York, Eliot Spitzer. Deportada de Estados Unidos por prostitución, ahora quiere un lugar en la legislatura del estado de Espíritu Santo.

Sensación en las favelas

Entre los otros famosos que compiten por algún escaño en la Cámara de Diputados federal -más allá de las celebridades televisivas Jean Willis y Dhomini, de la versión local de Gran Hermano - también está la reina del hip hop carioca, Tati Quebra-Barraco, toda una sensación en las favelas de Río; ella misma nació y se crió en Ciudad de Dios. Representa al Partido Laborista Cristiano, al igual que el reconocido diseñador de modas Ronaldo Esper, que se lanza desde San Pablo.

Una agenda menos seria que la de ellos dos ofrece el Payaso Tiririca (alias de Francisco Everaldo Oliveira Silva), figura legendaria de la televisión brasileña y candidato por el Partido de la República. "Quiero ser diputado para ayudar a los más necesitados, incluso a mi familia", bromea el cómico, cuyo eslogan de campaña es "Vote por Tiririca. Peor de lo que estamos, no podemos estar".

Otros candidatos menores que han decidido hacer uso extremo del humor y de la flexible legislación electoral para ponerse apodos que llamen la atención son "Nelson Mandela", alias de Adolphino Rosário Cruz; "Barack Obama", como se hace llamar Rosemar Luiz da Rosa Lopes, y "Ben Laden", el polémico apodo de Diodálio Alves da Rocha, con frondosa barba incluida.