Mimi Pons: "Extraño mucho a Norma, fue la persona que más me quiso"

Hace exactamente un año, la muerte de Norma Pons sorprendía a todas las redacciones. A días de sumarse a ShowMatch y en medio de un exitazo como La casa de Bernarda Alba, con premio Estrella de Mar incluido, Norma fue encontrada por su hermana Mimí en su domicilio del barrio de Palermo al que hoy, Personajes. tv pudo acceder. "Me cuesta aún entender su partida, siempre estaba ella y de repente no está y no lo puedo entender. Extraño mucho a Norma, fue la persona que más me quiso, que más me protegía, me quede sola", reconoce Mimí.

Además, dolida, confiesa que nadie del medio la volvió a llamar: "Sólo Javier Faroni que se comportó como un señor". No quiere mencionar a Antonio Gasalla, con quien Norma compartió más de 10 años de trabajo y remarca todo lo que su hermana ayudó a la madre del capocómico. "Nadie es amigo de nadie, Norma no tenía amigos, tenía compañeros de trabajo como yo. El ejemplo es José María Muscari que nunca me llamo después que murió Norma, después de todo lo que Norma dio en la obra de teatro... ni un llamado", dice.

"Mi hermana nació para ser artista, cuando tenía ocho años le preguntaron qué quería ser, y ella dijo ´monja o artista´. Yo tuve más suerte que Norma, pero mi marido me pidió que lo dejara y abandoné en el mejor momento de mi carrera. Cuando dejé de trabajar a Norma no la contrataban, estuvo seis años sin trabajar porque éramos las hermanas Pons. Ella nunca me dijo nada, pero yo veía las entrevistas... cuando lo decía, después volvía a casa y se olvidaba", recuerda.

"El último año de vida de Norma fue muy duro. A veces pienso si lo tenía planificado. Se murió de un infarto, pero por cómo se dieron las cosas yo creo que se fue despidiendo de todos, hasta quiso ser mediática, hablaba de Mirtha Legrand, de Gerardo Sofovich...", rememora y sigue: "Ella quería ser actriz del teatro San Martín, pero le cerraron la puerta en la cara", comenta. Con La casa de Bernarda Alba alcanzó lo que quería, pero señala que Norma se preguntaba: "Estoy haciendo Lorca, estoy llenando el teatro, ¿será una despedida?"

Entre tantos recuerdos, Mimí asegura que el mayor sufrimiento en la vida de Norma fue el fallecimiento de su madre: "Norma lo sufrió mucho, no sabía ni hacerse un huevo frito. Yo le decía ´qué te cuesta hacerte un churrasco, te tengo que cocinar todos los días´, fue una lucha hacerla comer. Norma vivía en el piso de abajo de mi casa, podíamos escucharnos y hasta vernos. Cuando yo hacía dos palmadas significaba que estaba la comida".

A las 5.30 del 29 de abril de 2014, ella sintió que tenía que llamar a Norma: "Estaba mirando Flashdance y sentí que debía llamarla para comentarle algo del baile. Si la hubiese llamado hubiese estado con ella. Una vecina la escuchó toser como a las 6 de la mañana, calculo que fue esa la hora en que murió. Cuando entro a su casa después y la veo sentada, la luz prendida, la teve fuerte, el nebulizador con el cable caído, la cama tendida... la toco y ahí me doy cuenta, pegué un grito que se escuchó en todo el edificio".

El 13 de diciembre de 2013 Norma había ido a Chacarita sin decirle nada a Mimí y había contratado su cremación. "Ese día no aparecía y me preocupé, cuando llegó me dijo que había estado en un lugar lleno de paz", cuenta, hoy, emocionada.

A un año del fallecimiento, Mimí la tiene presente más que nunca y en honor de su adorada hermana le realizará hoy una misa.