Controvertida y violenta película

"Trouble Every Day (un oscuro deseo)" ("Trouble Every Day", Francia-Alemania-Japón/2001). Dirección: Claire Denis. Con Vincent Gallo, Tricia Vessey, Béatrice Dalle, Alex Descas, Florence Loiret-Caille, Nicolas Duvauchelle, Rapha‘l Neal, José García, Héléne Lapiower, Aurore Clément y Marilú Marini. Guión: Claire Denis y Jean-Pol Fargeau. Fotografía: Agnés Godard. Música: Tindersticks. Edición: Nelly Quettier. Diseño de producción: Arnaud de Moleron. Presentada en DVD por Primer Plano exclusivamente en el microcine Godard, del hotel Elevage (Maipú 960). Duración: 101 minutos. Para mayores de 18 años con reservas (algunas escenas pueden herir la sensibilidad del espectador).
Nuestra opinión: regular

Quienes se fascinaron con ese sofisticado, contemplativo y cautivante ballet cinematográfico que fue "Bella tarea", se sorprenderán al saber que en ésta, su siguiente y hasta hoy penúltima película, la directora francesa Claire Denis construyó una de las historias más gráficas, radicales y revulsivas de los últimos años: en "Trouble Every Day (un oscuro deseo)" hay escenas de canibalismo, sexo explícito y orgiásticos baños de sangre que ya han generado controversias entre sectores irreconciliables de la crítica y del público en todos los países en los que se exhibió.

La realizadora de "Nenette y Boni" y "Vendredi soir" no le teme al ridículo y apuesta a la provocación con una trama casi surrealista de amores paralelos, insatisfechos y obsesivos y de relaciones marcadas por la hipocresía, los celos y el deseo.

Escenas pesadillescas, diálogos absurdos y situaciones propias del género gore (violencia extrema presentada sin sutileza alguna) que fueron pensadas para perturbar al espectador son el cóctel que armó Denis y que parece destinado exclusivamente a aquellos cinéfilos ávidos de propuestas audaces y experimentales.

Lo mejor de "Trouble Every Day" es la desatada vampiresa que compone con toda la animalidad salvaje de la que es capaz la gran Béatrice Dalle, pero en esta suerte de "Drácula" pretenciosa y desmadrada no todos los intérpretes tienen la misma suerte, empezando por el ridículo médico norteamericano que encarna Vincent Gallo.

Lamentablemente, la película -que se vio en una copia en 35 milímetros en los festivales de Mar del Plata y Buenos Aires en 2002- se estrena ahora con una proyección en DVD que no alcanza a exaltar en toda su magnitud el soberbio trabajo visual de la notable directora de fotografía (y habitual colaboradora de Denis) Agnés Godard. La sensual banda sonora del grupo Tindersticks es otro de los aspectos destacables de una experiencia límite destinada inevitablemente a la polémica.

Por Diego Batlle

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