Estrenos de teatro. Aquellas mujeres es un encuentro de hermanas cercano a las de Louise May Alcott

Dramaturgia: Sebastián Irigo y Teresa Donato. Luces y dirección: Sebastián Irigo. Intérpretes: Victoria Bertone, Mara Guerra, Graciela Muñiz y Carolina Pfaffenbauer. Escenografía: Ariel Vaccaro. Vestuario: Analía Morales. Música original: Colo Belmonte. Sala: Espacio Callejón, Humahuaca 3759. Funciones: viernes, a las 20. Duración: 60 minutos.

¿Habrá alguien que no haya leído Mujercitas o ni siquiera visto alguna de sus versiones cinematográficas? Seguramente son muchas y de distintas generaciones las que crecieron acompañadas por la novela publicada por Louisa May Alcott en 1868 y que, a la hora de imaginar, apostarían sobre qué habría sido de las hermanas March si hubieran nacido en el mismo tiempo y espacio que el público local.

Con esta premisa, Teresa Donato (guionista y columnista de radio) y Sebastián Irigo (también a cargo de la dirección como en Torna amore y Maten a Hamlet, entre otras) escribieron Aquellas mujeres, un guiño a Aquellas mujercitas, la continuación al primer libro. Encontramos entonces a Meg, Jo, Beth y Amy como Magda, Majo, Eli y Ani en el patio de la casa familiar en algún pueblo de la Argentina, reunidas para el cumpleaños número 50 de la tercera hermana.

Reconocer a cada una y cotejarla con la imagen previa es la tarea de los primeros minutos cuando una a una arrimen a la mesa del patio con macetas. Magda (Graciela Muñiz) es la anfitriona, la ama de casa tradicional, viuda y con hijos que ya no viven con ella; Majo (Victoria Bertone) es la escritora famosa, no atada a compromisos domésticos; Ani (Carolina Pfaffenbauer) también es viuda pero con dinero, se dedica a la pintura, le gusta el consumo, critica y amonesta todo el tiempo al resto; y Eli, con un largo vestido blanco, ronda entre ellas de espíritu presente ya que murió hace muchos años.

Las veremos intercambiar recuerdos a todas juntas, de a pares y también, con un mágico cambio de luces, en apartados soliloquios que desnudan lados inconfesados. El personaje que conduce la acción, que genera conflictos, que interpela a las demás buscando respuestas es el de Ani; en cambio, nuestra querida Jo transmutada en Majo tiene bajo perfil, habla despacio y está lejos de la hiperactiva y apasionada chica que ocupa el lugar central en la historia a la que esta obra, de explícita intertextualidad, refiere; Magda mantiene el ritmo del antiguo hogar y Eli, el ángel tímido que tocaba el piano, genera los momentos de más ternura y vivacidad.

Todo esto surge de la comparación con los personajes conocidos, un juego interesante en sí mismo. Pero si alguien no conociera estas claves, igual podría seguir este espectáculo sin reponer información porque Aquellas mujeres es una comedia sobre el encuentro de amigas o hermanas que se ven poco y que, al reunirse, revelan secretos, un tópico en general muy efectivo: con Mujercitas o sin ellas, esta propuesta en el Espacio Callejón podría adaptarse sin problemas a una sala del circuito comercial.