
Con banda extranjera, Noble sigue sonando ocurrente pero inofensivo
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Sony Music, 2 estrellas y media
A esta altura, el perfil de tipo de barrio expuesto a la vileza de la Capital suena extemporáneo a Iván Noble. En su séptimo álbum solista, el ex Caballeros de la Quema sigue conjurando aquella aflicción en una góndola de canciones de amor furtivo y desamparo que suenan moldeadas y límpidas, pero inofensivas. Secundado por la banda de John Mayer –que grabó los tracks a kilómetros de su autor–, Noble logra un disco de precisión aritmética y estribillos entradores, más cercano a Petty que a Sabina, aunque previsible. El toque country del guitarrista Mark Goldenberg y el pulso interpretativo de David Lebón en el anochecer rutero de "Llenemos las petacas" brillan en un trabajo por momentos casi erótico, como cuando canta "Entre mi lengua y tu ombligo hay algo personal".
Por Luciano Lahiteau




