
Asamblea de charangos y un segundo concierto
Rolando Goldman creó una orquesta y estrenará la segunda obra escrita para el instrumento por Alejandro Simonovich
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Concierto para charango / Orquesta Filiberto y R. Goldman / Teatro del Globo , M. T de Alvear 1155 / El miércoles, a las 20.30 / C. C. Burzaco , E. de Burzaco 750. El viernes, a las 20.
El lugar que ha ganado el charango se le debe, sobre todo, al trabajo de los charanguistas. Pasó de ser un instrumento limitado a la música andina (o a reuniones de musiqueros sin pretensiones profesionales) a ser protagonista de conciertos y a formar parte de una orquesta únicamente de charangos. Un trabajo lento pero constante: primero fueron difusores como Jaime Torres, que lo pasearon por el mundo, y luego los estudiosos como Rolando Goldman, que lo llevaron a la academia.
Hace dos décadas se estrenó el Concierto para charango y orquesta de Augusto Rattenbach, primero en su especie. Hace unos diez años, Alejandro Simonovich escribió su primer Concierto para charango y orquesta y ahora (el próximo miércoles, a las 20.30, en el Teatro del Globo) se estrenará el segundo que lleva su firma. Se escuchará por la Orquesta Nacional de Música Argentina Juan de Dios Filiberto, con dirección de Popi Spatocco y con Rolando Goldman como solista.
Además, Rolando creó la Orquesta Argentina de Charangos, de casi veinte integrantes con instrumentos en cuatro registros (maulincho, charango, ronroco en Mi y en La), que se presentará en octubre, en el Festival Sonamos Latinoamérica.
"La primera intención no es sacar al charango del ámbito andino porque tiene sobrados motivos para ser asociado a esta región -dice Goldman-. Pero me parece que dejó de ser pintoresco frente a una orquesta y se lo utiliza para incursionar en otras músicas. Ahora va más allá de sus orígenes, sin desdeñar todo lo que significa desde lo tradicional. Además, es cada vez más la gente que se acerca a estudiar con mucho compromiso."
Sobre este nuevo concierto de Simonovich dice que tiene partes que remiten a lo andino, pero va más allá de las fronteras de la Argentina. "Los tres movimientos del concierto tienen aspectos rítmicos que los vinculan a lo popular y tratamientos que lo vinculan a lo sinfónico. Simonovich tiene, desde el lugar de un compositor académico, mucho conocimiento de lo popular. Después del estreno en el Teatro del Globo vamos a repetir el concierto el viernes, en el Centro Cultural Burzaco. Es muy buena la decisión porque pasa muchas veces que los conciertos no se vuelven a tocar."
Goldman lleva algunos años dedicado a la música al ciento por ciento, como intérprete y como docente en el Conservatorio Manuel de Falla, donde se creó la orquesta de charangos. Años atrás repartía su tiempo entre estas actividades y su labor en la función pública como director de artes de la Nación. "Me siento reconfortado con la posibilidad de que la música haya ganado terreno. Pero el tiempo en que estuve en la dirección, si bien la música había pasado a un segundo plano, fue para mí una muy buena experiencia. Pensamos en la cultura no como un evento sino como un proceso más largo."






