La esposa del príncipe Guillermo de Inglaterra , Kate Middleton , volvió a elegir a Alexander McQueen para la boda real del príncipe Harry y Meghan Markle. La duquesa atrapó todas las miradas con un vestido de sus firmas favoritas que suele utilizar para los actos más relevantes de su agenda personal y profesional. De esta manera, Kate acertó una vez más en su estilismo, y a pesar de que fue madre por tercera vez hace menos de un mes, lució a la perfección el conjunto.
Este diseño, Kate ya lo había utilizado para el bautismo de Charlotte y en el cumpleaños de la reina Isabel II . Para completar su look, eligió un tocado del diseñador británico Philip Treacy y unos zapatos de Jimmy Choo, como su hermana Pippa.
Para esta boda, Kate dejó al príncipe Louis en casa, y entró a la ceremonia de la princesa Charlotte, que se desempeñó como dama de honor.
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