Martín, el único participante de Survivor que fue eliminado dos veces y quedó afuera por una mala estrategia: “Podía dar mucho más”
Su hija del corazón le insistió para que se anotara en el reality y en la isla hizo todo lo que quiso y se mostró tal cual es, inquieto y positivo
- 6 minutos de lectura'
Alianzas frágiles, estrategias equívocas y traiciones a la orden del día dejaron fuera de juego a Martín “Colli” Collante, que después de 52 días en una de las islas del Tapón de Darién, en Colombia, quedó eliminado de Survivor, Expedición Robinson, el reality extremo de Telefe. “Fue una picardía porque ya tenía una estrategia y un juego armados, y sentía que iba bien y todavía podía dar mucho más. La forma en que fui eliminado, por una de las tantas traiciones de Juanchi, no fue en beneficio de nadie”, se sincera “Colli” con LA NACIÓN. Fue el único participante eliminado dos veces, y cree que tenía todas las condiciones para llegar a la final, aunque el objetivo estaba cumplido.
-Antes de la unificación fuiste eliminado por primera vez y pasaste un día en la Isla de la Muerte, ¿cómo fue tu salida esta vez?
-Estaba más que contento con la experiencia. Mi objetivo era dar lo máximo por mí y mi familia y mostrarle a mi chiquito de un año y medio que si papá podía sortear juegos y desafíos, él también podía hacer incluso más y mejor que yo. Este es un juego unipersonal por un único precio y por el primer lugar. Podés hacer alianzas, ser de un grupo o de otro, pero la verdad es que llegás solo. Y cumplí con creces porque jugué todos los desafíos de fuerza, inteligencia, memoria, equilibrio y me di el lujo de cocinar todos los días que estuve en la isla y hasta hice pizza, y comí todo animal que se cruzó, caí en la isla de la Muerte, resurgí en esa instancia; me siento más que realizado.
-¿Cómo fue la experiencia en la Isla de la Muerte?
-Pasé apenas un día y tuve la suerte de que me recibiera Agustín Monzón y me compartiera su única comida, que era media bolsa de arroz. Salí muy positivo de ahí, fue como un regalo y no lo sufrí para nada.
-¿Pensabas que podías ganar?
-Sí. Estaba tranquilo con mi juego. Quería ser el ganador de Survivor, pero lo tomaba con calma. Veía que aquellos que mostraban un gran personaje quedaban afuera en la siguiente gala, como sucedió con Malena y Mauro. Considero que era bueno y daba para largo.
-¿Quién creés que puede llegar a la final?
-Aixa es una tremenda jugadora que tiene mucho con qué avanzar. Y en mi primera eliminación consideraba buen jugador a Agus. Hacer buenas alianzas te puede llevar lejos.
-¿El juego social fue el que más te costó? Porque en algunas oportunidades te hicieron a un lado. ¿Cómo lo viviste?
-Dejé el bullying en la secundaria, a mis 15 años, cuando me hacían esas cosas y me molestaban. Con mi hijo, mi vida cambió, y cuando madurás y tenés otras responsabilidades y necesidades, tenés la cabeza en otro lugar. Si ellos jugaban el juego de bullynear, y decían que yo no me bañaba, allá ellos. No me afecta porque lo desarmé hace años. Lo que decían hablaba peor de ellos que de mí, así que nunca me sentí atacado en ese sentido. No me complicó nunca el juego social, pero el contexto en el que entré a la unificación sí me fue complicado; entré con toda mi tribu en contra y en la siguiente gala todos me votaron, y con la tribu sur que estaba dividida y a una parte que me quería coalicionar, les di la espalda. Y fui el que destapó el iceberg y le puse el voto a Goldi, que terminó yéndose. Sinceramente, creo que jugué bien socialmente. Entre juego, convivencia y estrategia, creo que lo más flojo en mi caso fue la estrategia, y aún así pasé por encima de muchos grandes jugadores que cayeron antes que yo, como Fran, Mauro, Malena.
-Seguramente pasaste hambre y padeciste la lluvia y los bichos como todos, pero ¿qué fue lo que más te costó?
-Bajé quince kilos porque nuestra dieta era a base de coco y mango, que son diuréticos. Tenía la cabeza preparada para aguantar todo ese tipo de inclemencias, pero extrañaba horrores. Cuando entré al juego lo hice con la espalda bien cubierta porque todos me bancaron en esa decisión. Mi mujer, Daniela, me decía que me tocaba hacer el Survivor en Colombia y a ella acá con nuestro hijito. Y me decía que no se me ocurriera aflojar porque extrañaba. Pude apoyarme en ellos y eso fue muy bueno. En cualquier momento que pasaba un dron para filmarnos, yo hacía gestos para cada uno de mi familia: mi mujer, mi hijo Ramiro y la hija de mi mujer, Sabrina, que es mi hija del corazón. Cuando estaba en el reality Sabrina cumplió 15 años y le mandé un saludo especial que no se vio. No me importaba que no se viera todo eso porque lo importante es que era mi manera de conectarme con ellos, rompiendo la cuarta pared.
-¿Por qué te anotaste en el reality?
-No tenía objetivos. Me anoté por la insistencia de mi hija del corazón. Escaneé el código con la intención de verlo como cualquier plataforma porque me parece entretenido y me gusta. Y Sabri quería meter a alguien de la familia en la tele. Intentó meter a mi viejo en MasterChef, que ganaría de punta a punta porque cocina como los dioses, pero él no quiso saber nada. Y cuando me vio escanear el código me quemó la cabeza por un mes; le dije que no hasta que aflojé e hicimos un tik tok que tuvo muy buena repercusión. A partir fue un rally de ir pasando cada una de las entrevistas y etapas hasta que me confirmaron. Fue una experiencia súper positiva. Y me gustó poder mostrarme como soy, mis valores, mis actividades, no traicionarme, ser fiel a mí. La gente especulaba con no pescar, no cocinar y tirarse en la playa. Y yo cociné, pesqué, y me di el lujo de hacer yoga, enseñarles a hacer teatro y muchos juegos. No me quedó un hueco por cubrir.
-Antes de entrar al programa trabajabas como empleado de una farmacia en Once, ¿cómo es tu vida hoy?
-Sigo en la misma farmacia (risas). Hago vida de familia y laburante y sigo siendo tan inquieto como siempre: hago yoga, amo cocinar y quiero estudiar cocina profesional, hago teatro, escalo. Tengo muchos hobbies. Soy muy inquieto.
Otras noticias de Survivor, Expedición Robinson
Más leídas de Personajes
"Me echaron por mentir". Harrison Ford mostró las cicatrices que le ocasionó su primer y desconocido trabajo
"Quedé deslumbrado". La historia de amor de Evangelina Anderson y Martín Demichelis: un flechazo, una broma y mil mudanzas
"Situaciones dolorosas". Benjamín Vicuña habló de cómo tomaron sus hijos la separación de Pampita y Roberto García Moritán
"Recibí la llamada". Siete actrices de los años 70 y 80 que marcaron tendencia, impusieron su estilo y despertaron suspiros desde la TV