Plumas, música y humor para reivindicar un género pícaro

"El tiempo implacable no ha pasado en vano y toda aquella visión colorida y deslumbrante ya no es más que una pequeña luz en el recuerdo." La frase, dicha por el dramaturgo y periodista Julio César Viale Paz, se remonta a una época en la que el varieté reinaba en Buenos Aires. Brillantina, canto, danza, crítica y un público que más que espectador era cómplice. Para recordar, reivindicar y redescubrir esta esencia, llega el Primer Festival Internacional de Cabaret en Argentina (FICA), del 3 al 11 de diciembre en El Picadero (pasaje Santos Discépolo 1857). Noralih Gago es la artífice de esta gran movida por la que viene trabajando desde hace más de un año. Porque tanto cabaret como music hall o varieté son géneros hermanos.

"En el festival no hay estrellas. El cabaret es la única estrella", asegura la actriz, quien organiza y lidera el festival que comienza mañana, además de levantar la bandera del género teatral. En nueve días, 95 artistas nacionales e internacionales buscarán recuperar un espacio perdido. Seis compañías extranjeras y trece locales vestirán de cabaret una ciudad que ya supo lucirlo. El teatro Variedades, el Instituto Di Tella y la Botica del Ángel, entre otros espacios culturales, fueron la cuna de un humor transgresor que, combinado con canciones, baile y crítica social, supo forjar un género en sí mismo. "Nos está costando conservar el espacio. No hablo sólo de un espacio físico, sino de un lugar de coincidencia artística. El objetivo que tiene el festival es juntarnos para asegurarnos de que esta fuerza no desaparezca y de que vengan nuevos representantes detrás de nosotros", dice Gago, la cara cotidiana de la imponente y carismática Concha del Río.

Con un despliegue de espectáculos para adultos, adolescentes y niños, el FICA propone redescubrir el género. Las entradas para todos los shows, disponibles por el sistema Plateanet o en la boletería del teatro, cuestan 250 pesos. Por el escenario del Picadero pasarán la mexicana Astrid Hadad -a quien Gago define como la "culpable" de que su vocación sea el cabaret-, Florencia Peña, Carlos Casella, las mexicanas Las Reinas Chulas, Melania Lenoir, la española Pía Tedesco, Omar Calicchio, y Gago encarnando a Concha del Río, entre muchos otros artistas.

Habrá propuestas para todas las edades: Clac: una obra de película es una obra para niños y el "cabareteen" ¿Y dónde están los sanguchitos? está hecho por adolescentes y para adolescentes. En el festival conviven todos los subgéneros: un infantil comparte sala con un burlesque de trasnoche y nadie se alarma. El cabaret no discrimina, todos pueden entrar y ser parte de la celebración cabaretera.

Gago habla con emoción, con entusiasmo, con ansias. A su lado, Omar Calicchio asiente cada vez que el cabaret es elogiado, y afirma que cada artista que participa del festival aporta su visión particular del mundo. El domingo 4, subirá al escenario con su musical Calicchio.com.ar (Made in Liniers), en el que cuenta su infancia y adolescencia en ese barrio porteño. "Lo narro a través del tocadiscos que se escuchaba en mi casa. Todas las canciones que canto tienen que ver con mi historia", afirma. Una historia intransferible, completamente personal. "Éste es un espectáculo que hace mucho tiempo tenía ganas de hacer. Me encanta poder cantar estas canciones y pintar una época, los años 70 y 80."

A Gago, su personaje Concha del Río la hizo recorrer distintos escenarios. Entre ellos, el del Teatro Bar El Vicio, en México, cuna del Festival Internacional de Cabaret. "La compañía Las Reina Chulas hace este festival desde hace 14 años. La primera vez que fui, sentí que algo así tenía que pasar en la Argentina. La segunda, ya empezamos a charlar seriamente." Con el ideal de "hacer del mundo un cabaret", Las Reinas Chulas, las españolas Pía Tedesco y Roma Calderón, la rosarina Andrea Fiorino y Gago comenzaron a tener reuniones formales. Pensaron cómo hacer para poder difundir este género, en principio, cada una en su región. Ése fue el compromiso que este año se cumple, gracias a la respuesta positiva de cabareteros, artistas, y productores como Sebastián Blutrach, del Picadero. "Se juntaron todas estas voluntades y, gracias a eso, el festival se va a hacer realidad. No lo puedo creer cuando lo digo", dice Noralih.

Más allá de la visibilización del cabaret, hay un deseo que reivindicación del musical en sí mismo. "El teatro musical es importante, y el cabaret pertenece al género. Se suele frivolizar y es una posibilidad de expresión que sería valioso recuperar", dice Calicchio. Gago, por su parte, se enfoca en la resignificación de este mal llamado género menor. "Llegás a cualquier país, googleás cabaret y te sale un negocio de prostitutas, no aparece teatro. Por eso hay ganas de resignificarlo. Si bien empezó siendo eso, hoy es distinto. Tenía aires de clandestino que está bueno que ya no estén, pero sigue siendo un lugar del placer. Está absolutamente ligado a lo placentero, a los distendido y no por eso es menos profundo."

El puntapié inicial es la apertura a cargo de Juan Parodi, que estará al mando de una intervención urbana abierta a todo el público en la vereda del pasaje Enrique Santos Discépolo mañana, a las 21. En este comienzo se ve reflejada la universalidad del cabaret y los deseos de expansión: que llegue a todos los públicos y que se conozca. "En los libros de historia teatral no aparece como género", cuenta Gago. Historiadores, periodismo y crítica especializada no le dieron lugar a su análisis, salvo en contadas ocasiones. Puede ser que el cabaret se forje fuera de los libros. Hay géneros que se hacen en los escenarios: el cabaret se hace y se deshace con y por el público. La cuarta pared se rompe y el espectador es total protagonista. Quizá sea el público quien mejor entienda qué es el cabaret."

Hay placer en cada palabra que sale de la boca de Gago cuando habla del FICA. Hay placer en cada oración de Calicchio al hablar de su espectáculo y del género, y, seguramente, el aplauso del público multiplicará el placer durante una semana.

Todas las propuestas

El cabaret nacional estará bien representado. Florencia Peña y su obra Me canto encima tendrá lugar el lunes 5, a las 21. El miércoles 7, a las 20.30, será el turno de Carlos Casella y Babooshka, mientras que el cuarteto formado por Alejandra Perlusky, Melania Lenoir, Diego Bros y Carlos Kaspar se subirá al escenario el jueves, a las 20.30, para hacer Melodía Perversa Cabaret. Como cierre y unión mexicana, española y argentina, el domingo 11 tendrá lugar Concilio Cabaretero, Sagrada Bacanal. Las Reinas Chulas, Roma Calderón, Andrea Fiorino, Noralih Gago y Pía Tedesco se unen para "contaminar al mundo de cabaret". El bar del Picadero no se queda fuera del FICA y, a lo largo del festival, dice presente con espectáculos libres y gratuitos. La compañía mexicana La Guayaba y la Tlayuda será la encargada de presentar todas las Zapadas Cabareteras. El miércoles 7, a las 23.15, la rosarina Andrea Fiorino hará su Cabaret en una valija. El jueves 8 será el turno de Patria y Constitución (Dos mujeres y un quinquín), por quienes también ofician de maestros de ceremonia, La Guayaba y la Tlayuda. El viernes 9, también a las 23.15, los argentinos Matilde Campilongo, Mariela Acosta y Marcelo Keller tomarán el bar del teatro, y Carola Katz, Silvit Yori y Pablo Micozzi actuarán el sábado 10.