Pentágono dice que atacó más de 70 objetivos en operación contra EI en Siria
Fuerzas estadounidenses atacaron más de 70 objetivos en Siria el viernes, informó el Pentágono, en el marco de una importante operación militar contra...

Fuerzas estadounidenses atacaron más de 70 objetivos en Siria el viernes, informó el Pentágono, en el marco de una importante operación militar contra el grupo Estado Islámico (EI).
El presidente Donald Trump describió la ofensiva en su red Truth Social como una "represalia muy seria" por un reciente atentado que mató a tres estadounidenses en ese país el pasado fin de semana en el sitio arqueológico de Palmira.
Estados Unidos "golpeó más de 70 objetivos en múltiples ubicaciones del centro de Siria con aviones de combate, helicópteros de ataque y artillería", afirmó el Comando Central de Estados Unidos (Centcom) en un comunicado.
"La operación empleó más de 100 municiones de precisión contra infraestructuras y emplazamientos de armamento de ISIS conocidos", agregó Centcom, usando uno de los acrónimos del grupo.
Afirmó que desde el ataque en Palmira fuerzas estadounidenses y aliadas "realizaron 10 operaciones en Siria e Irak que resultaron en la muerte o detención de 23 efectivos terroristas", sin especificar a qué grupos pertenecían.
"Seguiremos persiguiendo implacablemente a los terroristas que buscan hacer daño a los estadounidenses y a nuestros socios en toda la región", dijo el almirante Brad Cooper.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria afirmó en una publicación en X que el país está comprometido en combatir al EI y "garantizar que no tenga refugios seguros en territorio sirio".
Tropas de EEUU en Siria
Los muertos estadounidenses en Palmira eran los sargentos de la Guardia Nacional de Iowa William Howard y Edgar Torres Tovar, y Ayad Mansoor Sakat, un civil de Míchigan que trabajaba como intérprete.
Washington afirmó que un tirador solitario perpetró el ataque del 13 de diciembre en Palmira, hogar de ruinas antiguas inscritas por la UNESCO y que en su día estuvo bajo control de combatientes yihadistas.
Trump, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Dan Caine, asistieron el miércoles pasado a la comitiva de soldados que recibió en Estados Unidos los tres ataúdes de los fallecidos.
El ataque contra tropas estadounidenses en Siria fue el primer incidente de este tipo desde el derrocamiento de Bashar al Asad en diciembre el año pasado.
El personal estadounidense que fue objetivo apoyaba la Operación Inherent Resolve, una coalición internacional para combatir al EI, que se apoderó de amplias franjas de territorio sirio e iraquí en 2014.
Los yihadistas fueron finalmente derrotados por fuerzas locales en tierra respaldadas por bombardeos aéreos internacionales, pero el EI sigue teniendo presencia en Siria, especialmente en el vasto desierto del país.
Trump ha sido escéptico respecto a la presencia de Washington en Siria.
El Pentágono anunció en abril que Estados Unidos reduciría a la mitad el número de efectivos estadounidenses, mientras que el enviado estadounidense para Siria, Tom Barrack, dijo en junio que Washington acabaría reduciendo sus bases en el país a una.
Actualmente, fuerzas estadounidenses están desplegadas en el noreste de Siria, controlado por los kurdos, así como en Al Tanf, cerca de la frontera con Jordania.



