La Popular
Se trata de un bodegón moderno, perfecto para ir en grupo y compartir los suculentos platos que ofrece. Si van por primera vez, a no dudarlo: empiecen con un vermut y pidan la milanesa La Popular.
Desde el techo cuelgan banderines rojos, pero la ambientación no se queda ahí: van a encontrar objetos vintage como pingüinos, sifones de soda y antiguos carteles publicitarios.
Club Social Deluxe
En este encantador lugar encontramos una fusión entre lo mejor de Nueva York y París. ¿Los favoritos de la casa? Las ribs horneadas a fuego lento y la crème brûlée. De viernes a domingos, el programa se completa con una banda de jazz en vivo, para disfrutar en una mesa íntima.
Hierbabuena
Es uno de los pioneros de la zona y ofrece cocina casera y natural. Un hit: los suculentos brunchs de fin de semana.
La pastelería orgánica es especialidad del lugar: recomendamos probar la cookie de chocolate con dulce de leche y cristales de sal marina.
De lunes a viernes, conviene llegar temprano: muchos acuden en busca del menú ejecutivo.
The Pizza
La especialidad de la casa se elabora con harina orgánica, masamadre con 72 horas de fermentación, queso de productores locales y mucho amor. La pizza de prosciutto italiano encabeza la lista de best sellers.
Programa completo
El Parque Lezama, de antiquísima belleza, vale la recorrida. Los fines de semana hay espectáculos itinerantes en el anfiteatro y feria de artesanías. Atención los viernes de verano, porque se suelen organizar ferias de comida orgánica.
Ahí mismo, en la casona de estilo italiano construida a mediados del siglo XIX, funciona el Museo Histórico Nacional. ¿El dato de color? Las atractivas cúpulas azules que se ven al fondo, sobre la calle Brasil, son de la catedral de la Santísima Trinidad: la primera iglesia ortodoxa rusa de Sudamérica.
¿Conocías el recorrido?