De nuestro archivo rescatamos dos bañosque se reformaron para unirlos al vestidor. En el primero, la madera contra un tono oscuro crea un clima contemporáneo y sofisticado. En el segundo, una excelente iluminación se une a la suntuosidad del blanco y un paisajismo vintage para un aire escenográfico.
Transición sofisticada
Una reforma integral llevada a cabo por los dueños de casa, Maica Bruzzo, socia de Mesopotamia BA y el arquitecto Ignacio Luis Orrico abrió el espacio necesario para este baño amplio que se encuentra junto al vestidor de la suite principal.
Todo se refleja en pisos de porcelanato símil mármol. Detrás de una mampara con borde de hierro negro, el sector privado de baño y ducha completamente revestido en el mismo material.
En el box de ducha, la mampara de vidrio con borde de hierro que reitera el estilo de la puerta, pero con vidrio traslúcido.
"Transformamos dos patios ociosos en este baño con vestidor de perspectivas largas y un orden espacial progresivo", cuenta Maica Bruzzo
Luz plena
El diseño de iluminación que brinda comodidad absoluta y destaca detalles originales es la clave de este impactante baño conectado con el vestidor.
"No pusimos luz en el techo, la repartimos: una fila de lámparas de camarín sobre el espejo, dicroicas en el macetero, una tira de led en la pared divisoria detrás del vidrio y en cada estante del mueble", cuenta la arquitecta Dolores Otamendi, a cargo del proyecto.
Junto a la bañadera exenta con grifería de pie, macetón plantado con
El vestidor se hizo a medida. A medida en serio. "Contamos cuántos zapatos tenía la dueña de casa, si de caña alta, si bajos, si con taco. Y en función de eso armamos el mueble", recuerda Dolores Otamendi.
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