El momento se determina mediante un método analítico, en el cual se analizan factores como PH o azúcar, y un método degustativo, en el que se prueba la uva en viñedo buscando la madurez de la semilla y de la piel.
¿Qué diferencia a la uva blanca de la tinta en términos de cosecha?
Las uvas blancas son más tempranas que las tintas, aunque depende del destino que tendrá la producción. Si está dirigida a espumantes, se cosechará mucho antes que si está destinada a vino.
¿Cómo se cosecha?
Existen dos tipos: mecánica y manual. En nuestro caso, para vinos premium se realiza de forma manual. El cosechador se equipa con tachos, guantes y tijera, corta los racimos limpios, elimina los que tienen algún problema de sanidad y deposita la uva en cajas plásticas de unos 500 litros/kilo (bins). Otra alternativa para las uvas de alta gama es la cosecha en cajas plásticas de 15 kilos, cargadas directamente a un camión, por lo que no sufre el traspaso de recipiente.
¿En qué varía una cosecha temprana o tardía?
En todo. Los perfiles de los vinos serán totalmente distintos. Existe un antes y un después fuera de rango, es decir, si la uva está muy verde y se cosecha pronto no habrá grado alcohólico, porque no tendrá azúcar. Y si se cosecha muy tarde, obtendremos frutas sobremaduras. Entonces, dentro de un período de tiempo se cosecha según el perfil del vino que se busca. Una uva en óptimas condiciones posee un período de 20 días que, según el perfil de vino que se busque, será el momento de cosechar.
¿De qué depende una buena cosecha?
Fundamentalmente, de tres factores: el terroir (el suelo, la altitud, el agua); las condiciones climáticas y la acción del hombre sobre el viñedo en las tareas de la planta, su fertilización o riego.
Novedad
Junto con la cosecha, Navarro Correas presentó la 3a edición del vino Selección del Enólogo, criado 28 meses en barricas.
