La maratón francesa en la que se come queso, vino y ostras
Cuando comienza la carrera, estás rodeado de corredores vestidos con tutús y trajes de pitufos debajo de sus baberos. Cada paso te lleva a impresionantes viñedos y hacia el próximo castillo. De repente, ya corriste el primero de los 42 kilómetros y estás sudando por el calor del verano francés. Hay personal repartiendo agua, pero todos se están preparando para el vino . Así es la Maratón del Médoc.
Las maratones son un mundo de barras de granola, ampollas y paquetes azucarados que dan energía. Esta clásica carrera francesa a través del país del vino tiene todo eso, así como un ambiente de fiesta y 23 estaciones que ofrecen vino, queso, ostras y foie gras con degustaciones en una pintoresca bodega.
El tono se establece la noche anterior, cuando los participantes tienden a complementar la tradicional cena de pasta cargada de carbohidratos con los saludables vinos locales. La carrera de cada año tiene un tema, como "Parque de atracciones" o "Cuentos y leyendas", así que no es sorpresa ver a un corredor vestido como Robin Hood.
La Maratón de Médoc se trata más sobre el viaje que el destino. Capaz ni te das cuenta de cuando termina porque estás muy ocupado tomando vino mientras toca una orquesta. Aún así, correr 42 kilómetros siempre es un desafío. Sin embargo, los maratonistas tienen un cartel que se ve a lo largo de la carrera para incentivarse: "Dolor es solo la palabra francesa para pan".
La carrera se lleva a cabo cada mes de septiembre y te podés registrar en el sitio web oficial con la opción de reservar alojamiento al mismo tiempo.