Robux, PaVos y otros regalos virtuales
Para Navidad, Tomás, de 10 años, pidió plata. Pero no quiso pesos, ni dólares ni euros. Pidió que le depositaran en su cuenta 5000 Robux, el dinero que solo sirve para usar en Roblox, el mundo virtual que más le gusta habitar por estos días de vacaciones y uno de los juegos preferidos (y adictivos) de los más chicos. Santiago, en cambio, le pidió a Papá Noel 3500 PaVos, algo similar a los Robux pero para gastar en Fortnite, otro de los juegos que más atrapan la atención de los niños por estos días.
Si este año el arbolito de algunos estuvo más vacío que de costumbre, no solo se debió a la crisis económica o a la decisión familiar de pasar unas Fiestas más austeras. También, en parte, fue porque muchos de los regalos pedidos no venían en un paquete o con un envoltorio con moño para abrir.
Varios de los obsequios fueron regalos virtuales, sin duda los más solicitados en Navidad especialmente entre los niños de 8 a 12 años. Y aparentemente lo serán también en Reyes, ya que muchos buscarán volver a llenar mañana sus billeteras virtuales después de (¿mal?) gastar su dinero en acondicionar su preciado avatar. Porque cabe aclarar que los Robux o los PaVos solo sirven para lookear al personaje comprándole unas zapatillas, botas, skins, gorras o remeras más cancheras. Es decir, la moneda sirve para adquirir accesorios estéticos que no los vuelve mejores jugadores ni los hace subir niveles en el juego.
El dinero virtual (que cuesta dinero real, claro) es solo uno de los presentes inmateriales que los chicos más piden cuando se acerca una fecha especial. Pero no se reduce a los videojuegos. También, dentro de esa lista de pedidos intangibles que los chicos hacen se incluyen cuentas premium en Spotify, una suscripción anual a Playstation Plus o algún juego pago del extenso catálogo de PlayStation Store, donde los costos pueden llegar hasta los 70 dólares o más.
"Para esta Navidad Santi pidió PaVos y accedimos porque claramente no quería otra cosa y venía pidiéndonos desde hace rato –dice Soledad Pascualini, la mamá–. Pero él sabe que solo se los regalamos en fechas especiales, no es que le estamos comprando todo el tiempo PaVos como sí veo que hacen algunos de los padres de sus amigos", aclara Soledad, que cuenta que el regalo que Papá Noel dejó esta Navidad en la cuenta de Fortnite de Santi fue de 3500 PaVos.
"Gastamos unos 42 dólares, que es lo mismo que podíamos llegar a gastar en una juguetería. Lo primero que hizo Santi fue comprarse un skin de la Señora Jengibre y otras cosas más. Todavía le queda plata, porque la condición fue que no se los gastara de golpe. Ahora para Reyes pidió un juego de la PlayStation Store, pero creo que ya son demasiados pedidos parecidos y con el papá no queremos que se la pase jugando el verano a la Play, así que le dijimos que no".
Aunque pidió 5000 Robux, Tomás recibió la nada despreciable suma de 6200. Según cuenta Luciana Botti, la mamá, gastó unos 1800 pesos en un sitio no oficial. "Entré a la app y 5000 Robux salían como 200 dólares –cuenta–. Le dije a Tomi que lo sentía, pero que obviamente no iba a gastar esa cantidad de plata. Pero al rato me puse a investigar y descubrí que en algunos sitios no oficiales te los venden mucho más baratos. Sería algo así como ‘Robux Blue’, pero más baratos. Es cuestión de fijarse bien en las calificaciones positivas que tiene el vendedor porque te piden que le pases el usuario y la contraseña para acceder a la cuenta de Roblox de tu hijo y hacer el depósito", dice Luciana, que cuenta que es la primera vez que le regala a su hijo dinero virtual.
"No sabía bien qué regalarle porque está en una edad en la que casi no juegan con juguetes. Y entre gastar en algo que iba a usar 10 minutos y en esto, prefería esto. Además me parece que es una buena manera de aprender a administrar la plata. Aunque sea virtual, sabe que si se le acaba se queda sin nada –dice–. Lo primero que hizo con la plata es comprarse unas alas de ángel que quería hacía mucho y después cosas que salían muy poco. Él mismo me decía que eso era muy caro y que no valía la pena gastar sus Robux en eso, y prefería ahorrarlos o regalarle parte a su primo, que cumple en unos días".
Constanza Sánchez cuenta que Felicitas, su hija de 12 años, recibió ropa para Navidad. Y que para Reyes le tiene preparada una sorpresa: le abrirá una cuenta Premium en Spotify como regalo. "A ella le encanta la música, está todo el tiempo con los auriculares puestos. Feli escucha de todo y se bajó la app gratuita a su teléfono, pero se queja de las publicidades. Por eso que tenga música ilimitada a su alcance me parece el mejor regalo que puedo darle", asegura Connie, que comparte con su hija el amor por lo musical.
A Aldana Romero, mamá de Ramiro, de 11, y Federico, de 13, le piden desde hace meses la suscripción a PlayStation Plus. Además de tener antes que nadie los adelantos de algunos juegos, ser Plus permite jugar con amigos online, acceder a decenas de juegos sin costo y otros tantos más baratos. "Casi todos sus amigos están suscriptos y ellos vienen insistiendo en que también quieren eso. Es más una cuestión de pertenecer. Yo les dije que se las regalaba para Navidad, pero al final les regalaron tanto que no quise. Veremos si los Reyes vienen con la suscripción", bromea y acota que últimamente todos los pedidos de regalos van en esa dirección. "Es lo que les interesa. No sé si está bien o mal. Es como es. Punto".