Un músico de buena familia

A mediados de los años 70, cuando su padre y su tío -Hugo y Osvaldo Fattoruso, los dos nombres mayores de la música uruguaya- formaron Opa en los Estados Unidos, él aún no había nacido. Sin embargo, hoy forma parte de un grupo que es algo así como la "continuidad histórica" de Opa, el Trío Fattoruso, con el que se presentará esta noche y mañana, en Uno y Medio -un coqueto lugar recientemente inaugurado en Suipacha 1025- adelantando temas de su segundo álbum, próximo a editarse, Brainstorming .

Pero para Francisco Fattoruso, que de él se trata, hijo del legendario Hugo y la cantante brasileña María Fátima, "niño prodigio" -nació en 1979- y una especie de Maradona de la música oriental (es un virtuoso del bajo, compone, canta, produce y toca todos los instrumentos), el trabajo con el Trío es sólo una parte de su hiperkinética actividad: el último fin de semana debutó en Buenos Aires -en el escenario de Niceto, como teloneros de los también uruguayos Abuela Coca- con Gaucho, una banda en la que canta y compone buena parte del material.

Y pocas semanas atrás actuó en el Teatro ND Ateneo como bajista de la banda de Dante Spinetta, que mostraba su primer álbum como solista, Elevado . Este mes viajará a Suiza para trabajar con unos productores de house en un proyecto de música electrónica.

Por si eso fuera poco, también contribuye con composiciones para un grupo llamado Lua (en el que tuvo que declinar su participación de la banda en vivo), que cuenta en sus filas a la cantante Ana Alvarez De Toledo y los hermanos Ibarburu. Y participó del nuevo álbum de Emmanuel Horvilleur.

Su trabajo con Dante y Emmanuel llegó como lógica consecuencia de sus años como bajista de Illya Kuryaki and the Valderramas, con los cuales conoció el éxito masivo en países como México, Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia, cuando tenía apenas 18 años.

Pero Francisco, que hace música desde que puede recordar y lleva desde siempre una vida trashumante, habla de todo esto con la mayor naturalidad y el "perfil bajo" característico de los músicos uruguayos.

De Las Vegas a Montevideo

Hugo, su padre, se casó seis veces; su tío Osvaldo una sola, y se divorció en la noche de bodas. Francisco nació en Las Vegas, "un lugar donde no nace nadie. Cuando estoy en Nueva York y me miran el pasaporte me preguntan: "¿Cómo puede ser?"", dice riéndose. En la actualidad, vive entre Buenos Aires y Montevideo. Su padrino es nada menos que Milton Nascimento.

Cuenta Francisco que a los Shakers -los recordados "Beatles del Río de la Plata" que lideraban Hugo y Osvaldo- los conoció de grande y por su propio interés, cuando vio una foto de los flequilludos en la casa de su abuela. Y asegura que su padre nunca le mencionó una palabra de lo que habían sido los Shakers, y tampoco le comentó nada acerca de Opa.

Pero aun antes de los Shakers y de Opa, hubo otro Trío Fattoruso, formado a fines de los años 50 por su abuelo Antonio junto a sus dos pequeños hijos, que aún no habían ingresado en la adolescencia. En una especie de bella parábola familiar, Francisco ocupa ahora el lugar de su abuelo en esta nueva versión del Trío: "Mi padre y mi tío estuvieron peleados como diez años -cuenta-. De repente empezó a haber una onda un poco mejor, y a la vez yo estaba entrando como en otra etapa de mi vida musical. El productor del trío, Neil Weiss (jefe del sello Big World), estaba trabajando con Hugo en su segundo disco solista para la compañía, el sucesor de Homework , y le dijo: "¿Por qué no grabás un par de temas en trío con Osvaldo y con Francisco?" A mí me pareció fantástico; en esa misma semana, Hugo se estaba separando y se vino de Nueva York a Montevideo, estuvimos viviendo juntos unos meses. Justo ahí Osvaldo lo llama y lo invita a tocar algo juntos. Fue como que por un lado Neil le propuso eso, y por otro el otro Osvaldo le dijo de hacer un grupo, o sea que había una buena energía. Ensayamos unos temas, hicimos unas pocas presentaciones y enseguida grabamos el primer disco ( Trío Fattoruso , editado por Big World en 2001) que, para mi forma de ver, es como una especie de demo, porque a medida que íbamos tocando, el sonido del grupo fue evolucionando. Cuando salió, casi ya ni tocábamos esos temas".

Tormenta de cerebros

Muy distinto es el caso del nuevo álbum, Brainstorming , cuya aparición está prevista para septiembre. Según Francisco, "fuimos al estudio y grabamos 23 temas, y los dividimos en dos. Ahora sale uno que contiene las composiciones con teclados. Es un disco bastante variado: tiene cosas de fusión, hay dos temas de Eduardo Mateo, está tocado muy libremente. Y el segundo -que se editará el año próximo- es todo con piano acústico. Grabamos en vivo en Circo Beat (el estudio de Fito Páez), y no tiene nada que ver con el primer álbum, porque lo preparamos y está hecho después de haber tocado en vivo como cien veces. Quedó bueno".

-¿Y cómo te sentís tocando con tu padre y tu tío?

-Es un sentimiento doble. En lo musical, es magnífico, porque la verdad es que es increíble lo que hacen ahí. Y tenemos la conexión de la música, cuando estamos tocando es como que no lo veo como mi padre, es un tecladista. Es muy natural, fue así toda la vida, Hugo me hizo tocar con él desde que era chico. Por otro lado, está lo familiar, son mi padre y mi tío, entonces en algunos momentos yo es como que voy por otro lado. Como ocurre en cualquier familia, me imagino.

Francisco Fattoruso

• A los 24 años ocupa el lugar de su abuelo en el Trío Fattoruso, que ahora comparte con su padre y su tío, las leyendas vivientes de la música popular uruguaya: Hugo y Osvaldo.

• Tocó con los Illya Kuryaki & the Valderramas; grabó en el disco solista de Emmanuel Horvilleur, y fue el bajista de la banda que Dante Spinetta utilizó para presentar su disco Elevado.

• La última semana mostró en Buenos Aires su nuevo grupo, Gaucho. Por si esto fuera poco, este mes viajará a Suiza para trabajar con unos productores de house en un proyecto de música electrónica.

Por Claudio Kleiman

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