Cartas de lectores: Esencial, entorno, cuadernos
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Esencial
Leyendo las noticias sobre el proyecto de ley que declara a la educación como servicio estratégico esencial, y por la actitud que tomó la bancada de Unión por la Patria, parecería que en la Argentina los sindicatos son más importantes que la educación de mis conciudadanos.
Así estamos.
Sergio Ohanessian
DNI 10.129.066
Entorno
Diariamente observamos que, paulatinamente, al expresidente Alberto Fernández le van “soltando la mano” personas de su círculo más cercano, políticos y periodistas, hecho que constituye una clara demostración de la necedad y el fanatismo que produce la ignorancia de quienes lo defendieron y lo entronizaron, abriendo así la posibilidad de que se concretaran delitos que no registran antecedentes en la historia del país.
Confiemos en que la Justicia sea ecuánime en esta oportunidad y le aplique las condenas de las que el expresidente se ha hecho merecedor.
Mientras tanto Alberto Fernández vivirá cumpliendo el castigo que le impone la sociedad: la soledad.
Oscar Edgardo García
osedgar@yahoo.com
Cuadernos
Felicito a Diego Cabot por su tarea periodística. Y en la misma línea lo hago con el lector Firvida, quien exige el definitivo juzgamiento y penalización de las partes intervinientes en la causa cuadernos. Llama la atención el silencio de las cámaras empresariales sobre el particular. ¿Será que sus asociados prefieren que el tema se diluya definitivamente?
Han bailado el tango de a dos. Ahora prefieren un “paren la música”.
José María Ugarte
ugarte.josemaría@gmail.com
Mandato evangélico
Leo en la edición de ayer que el cura Olivera Ravasi fue expulsado de la diócesis de Zárate al gestionar la visita de diputados libertarios a represores condenados en el penal de Ezeiza, por “conductas opuestas al testimonio cristiano”. Ahora, me pregunto: ¿qué hacemos con aquel mandato evangélico “porque estuve preso y me visitasteis”? ¿Borramos la cita de Mateo 25:34-36, señor obispo de Zárate-Campana?
¡Coherencia, por favor! En fin.
Juan Carlos Sorondo
jcsoro@yahoo.com.ar
Ingenua inocencia
Como tan bien sintetiza Fernando Savater en Solo integral (Edit. Ariel, 2022), el más completo tirano que es el pueblo goza de un dominio y veneración extraordinarios y es inocente por ser siempre engañado o traicionado pero nunca culpable: ¿puede desde 1930 esa ingenua inocencia durar tanto?
Eduardo B. Arribalzaga
DNI 8.642.397
San Martín
Hoy se cumplen 174 años del fallecimiento del padre de la patria, el general José de San Martín. Vuelve a su tierra en 1812, se embandera con el ideal de un mundo nuevo y se pone a su servicio. Jefe de un ejército profesional, fue libertador de pueblos, no conquistador. Como gobernante, honesto y justo. Parco en el hablar y breve en la prédica, detestó la verborragia discursiva. Mandatario ilustrado, creó instituciones para los pueblos que gobernó, y fundó escuelas, bibliotecas, etcétera. Diría: “Para defender la libertad y sus derechos, se necesitan ciudadanos de instrucción”.
Fue honorable en lo público y privado. El viajero Enrique Brackenridge en 1820 visitó a su esposa Remedios, que en su ausencia vive con sus padres y dice: “Las virtudes privadas y discretas en la vida de San Martín me dieron una opinión muy favorable del hombre. La excelencia y pureza de la vida privada es, en conclusión, el mejor cimiento de la confianza pública”. Las máximas que escribió para educar a su hija son espejo de su propia conducta ética. Dejó el espacio que con justicia había ganado con su entrega sin claudicaciones a la causa americana y se retiró al ostracismo voluntario, para no perjudicar con su persona a las nuevas naciones que se constituían, dejando que la gloria de terminar la liberación del continente quedara en otras manos, con templanza, en silencio, sin queja, ni revancha espuria. Solo era un hombre, pero ¡qué grande fue su humana capacidad de vencer debilidades y alzarse sobre ellas con estoicismo, guiado por un mandato moral cultivado y determinado a un propósito superior! Hay tiempos sensibles en la historia argentina en que su figura, por oposición, se agiganta, y el de hoy es uno de ellos. Es el momento del regreso de los próceres a la memoria del pueblo. El general Manuel Belgrano, su amigo y hermano en la gloria, deseó a la patria que los “buenos ciudadanos trabajen para remediar sus desgracias”. Seria plausible que los argentinos, alzando la mirada a los grandes que murieron olvidados y un día fueron guía y ejemplo de una gran nación, se unan para remediar sus desgracias y restituyan a la Patria su antigua dignidad.
Florencia Grosso
DNI 3.482.166
Inclusión
Recomiendo a los que piensan que los taxis en la ciudad de Buenos Aires son un servicio público que traten de abordar uno con un pasajero en silla de ruedas. Es una de las tantas exclusiones a los que se ven sometidos los habitantes que deban usarla para poder desplazarse. Al hacer señas para que paren y ver la silla aparecen las 1000 excusas: “no entra en el baúl”, “me raya el tapizado”, “no tengo lugar”, etcétera.
Hay honrosas excepciones de choferes que paran y no protestan, pero hasta encontrar a esa persona de bien puede pasar un largo rato. ¿No debería sancionarse a los que no levantan a estos pasajeros? Porque veo muchos agentes de tránsito en la ciudad que ante cualquier falta ponen multas.
A quien corresponda: para hablar en serio de inclusión, más allá de rampas, veredas en buen estado y educación vial, hace falta que sea una obligación que los taxistas transporten a todos los pasajeros, con discapacidades o no.
Inés García Oliver
DNI 4.728.699
En la Red Facebook
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“Tremendo”- Adrián Renaud
“Por Loan se están nombrando a un montón de pequeños olvidados que están desaparecidos, ojalá esto sirva para llegar a buenos resultados y se ocupen con responsabilidad los que deben hacerlo. Todos”- Susana Hansen
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