A. Bonfatti: "Enfrentamos a las organizaciones criminales más connotadas"
Antonio Bonfatti es el presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe y presidente del Partido Socialista. Fue gobernador entre 2011 y 2015, cuando lo sucedió Miguel Lifschitz (en la provincia no hay reelección). Hoy está embarcado en uno de sus máximos desafíos: tratar de regresar a la gobernación, en una elección en la que enfrenta una fuerte competencia, con el peronista Omar Perotti (quien no accedió a una entrevista) y el radical José Corral.
En las PASO de abril Bonfatti fue el candidato más votado, pero la interna peronista, con dos postulantes, sumó más voluntades. En una entrevista con LA NACION, defendió la gestión socialista y aseguró que hubo mejoras en la lucha contra el narcotráfico, el principal cuestionamiento de la oposición.
-Luego de la extensa actividad política, ¿qué experiencia le dejó esta última campaña?
-Yo tengo una ventaja: conozco la provincia palmo a palmo. He hablado con todos los sectores de la vida económica, política, social, cultural de Santa Fe. Pero fue una campaña agresiva contra mi persona. Yo no he contestado agravios, simplemente seguí adelante con nuestra propuesta. Me sorprendió, hubo acusaciones totalmente falsas, pero nosotros vamos a seguir por este camino de proponer y a su vez de recordar a los santafesinos de dónde venimos y lo que hemos hecho.
-Cree en las encuestas que adelantan una marcada polarización entre el FPCyS y el PJ?
-Creo en el trabajo profesional y serio de las empresas que realizan las encuestas. Sin embargo, solo nos muestran una fotografía del momento. Son una buena herramienta de trabajo para el equipo de campaña, pero el único elemento que decide el resultado es el voto de los ciudadanos. Nuestras encuestas nos ponen arriba de nuestros competidores y esto ha sido consistente durante toda la campaña. Fui, individualmente, el más votado, y confiamos en que el domingo se ratificará esa tendencia.
-¿Fue una campaña limpia?
-Por desgracia, no. Nosotros sí hicimos una campaña de propuestas y de diálogo permanente con la gente, pero nuestros opositores atacaron con mentiras y calumnias. Nosotros denunciamos en varias ocasiones las maniobras de desprestigio y los miles de pesos gastados en redes sociales para afectarnos insistiendo en que con este tipo de bajezas no se puede mejorar Santa Fe y se desprestigia a la política en general.
-¿Cuál es su principal desafío si gana otra vez la gobernación?
-Generar más y mejores empleos. El objetivo de la futura gestión es cambiar la matriz productiva de la provincia. Vamos a invertir $5000 millones desde el año próximo, con subsidio de tasas para proyectos que generen competitividad, valor agregado y trabajo decente. Vamos a seguir apoyando la economía social y los programas de desarrollo que han tenido muy buenos resultados, como el ABRE y el Nueva Oportunidad. Seguiremos disminuyendo las brechas de desigualdad de manera constante con educación y salud. Y combatiendo a las mafias, deteniendo a sus líderes, decomisando sus bienes, como solo en Santa Fe se hace, y mejorando las fuerzas de seguridad para que tengamos una sociedad con paz y convivencia.
-¿Cuáles son para usted las principales diferencias con el PJ?
-Hay muchos ejemplos: hoy tenemos la mejor salud pública, la mejor educación. Recuerdo de dónde venimos, porque en 24 años de gobiernos peronistas se hizo un solo acueducto; nosotros, en 12 años, hicimos 7. Todos recordarán que en los hospitales antes había que llevarse la sábana o el hilo para el cirujano e hicieron un solo hospital con plata de la Nación. Acá también hay diferencias: nosotros hicimos 10 con plata propia y un centro de especialidades ambulatorias y medicamentos que producimos. Recuperamos las escuelas técnicas. En la Justicia tenemos hoy juicio oral y público.
-En el reciente debate, le cuestionaron la inseguridad...
-Quedó claro que fuimos los que enfrentamos a las organizaciones criminales más connotadas, y vaya si están presas, que cuando los encarcelamos balearon mi casa, después la de los jueces, a algunos periodistas que denunciaban los amenazaron. Santa Fe es la única provincia que tiene ley de confiscación de bienes de los delincuentes, y hay que pegarles allí donde más le duele, que es la economía.