Anillaco, la tierra de la decepción

ANILLACO (De una enviada especial).- En la tierra que adora Carlos Menem estaba todo listo para la "boda del siglo". Pero ayer al pueblo de Anillaco lo invadió la decepción. Su hijo dilecto se casará mañana con Cecilia Bolocco en La Rioja y no, como estaba previsto, en la residencia La Rosadita, del ex presidente.

La frustración se notaba en el silencio de su gente, en los rostros con una sonrisa forzada de los pocos que caminaban ayer, esperanzados en que a último momento "El Carlos" (como le dicen aquí a Menem) retomara el plan original de festejar su casamiento en este pueblo.

Hace casi un mes que comenzaron los trabajos para mejorar la imagen de la tierra del ex presidente: se asfaltaron calles, se pintaron cordones de veredas, se iluminó la entrada al pueblo, y hasta había listos varios kilos de pan casero, tortillas y queso de cabra para regalar a la feliz pareja.

El único movimiento en las calles era el de los periodistas que también esperaban la llegada de Menem, que finalmente decidió pasar el día en la capital riojana (como se informa por separado). Los cronistas chilenos estaban de un lado para otro desconcertados porque se habían alojado en el Automóvil Club Argentino y en la hostería Los Amigos, y todo ocurrirá a más de 100 kilómetros de Anillaco.

Caras largas en La Rosadita

"Teníamos tantas ganas de que se casen acá... Estábamos tan entusiasmados", se lamentó María Rosa, una riojana de unos cuarenta años que ayer estaba con su marido en la puerta de La Rosadita, mientras unos turistas sacaban fotos de la residencia.

En los dos locales de productos regionales también había ayer caras largas. Tienen todo tipo de souvenir alusivos a la boda Menem-Bolocco. "Ella vino de Chile en misión de periodista... Parece que el presidente la enamoró a primera vista", dice el poema grabado sobre un plato de cerámica.

El lugar está repleto de corazones, mates y gorras con inscripciones, prendedores con la foto de los novios y hasta higos con el nombre de "La Chechi" (como le dicen a Bolocco), a 5 pesos.

"Nos da pena", dijo Laura Nieto, de Regionales Anillaco. Freddy, el dueño, intentaba comunicarse con alguien de La Rioja para ver si venía Menem, pero por cuarta vez le dijeron que se quedaba en la capital provincial. En La Rosadita sólo uno de los perros de Menem corría de un lado para el otro.

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