Coronavirus: tras la confirmación del contagio de un diputado, testean a otros legisladores y hay dudas sobre la continuidad de las sesiones remotas

Las señales de alarma se encendieron ni bien se conoció la noticia de que un diputado nacional, el riojano Julio Sahad, tiene coronavirus. Sahad estuvo presente en la última sesión de la Cámara baja y volvió infectado a su provincia. Cuando Sergio Massa, presidente del cuerpo, se enteró de la novedad, activó de inmediato el protocolo y dispuso que los diputados que estuvieron en contacto estrecho con Sahad en el recinto se realizaran un hisopado preventivo.

Según consta en los videos que registraron la última sesión, los diputados Facundo Suárez Lastra (Juntos por el Cambio), Romina Del Pla (Frente de Izquierda), José Ramón (Unidad para la Equidad y el Desarrollo) y Fernando Iglesias (Juntos por el Cambio) fueron quienes se ubicaron más cerca de la banca de Sahad, con el respectivo distanciamiento social. Todos ellos decidieron realizarse el hisopado; a ellos se suma, también, el jefe del bloque de Pro, Cristian Ritondo.

"Por recomendación de Marcelo Halac, director médico de @DiputadosAR, ante el positivo de @SahadJulio, de nuestro bloque, me realizaré un hisopado preventivo. No tengo síntomas, estoy cumpliendo con el aislamiento", comunicó Ritondo en su cuenta de Twitter.

Además de los hisopados preventivos a los legisladores, se le realizará el test al personal legislativo que estuvo en contacto con el legislador riojano durante la sesión, que se prolongó por casi diez horas. Asimismo, Massa dispuso una amplia desinfección el Salón Delia Parodi, en el Salón de los Pasos perdidos, en el recinto, bajo recinto, como así también en los bares y baños del edificio principal.

Lo cierto es que el caso del diputado Sahad arrojó aún más dudas sobre la continuidad del funcionamiento remoto de la Cámara de Diputados mientras se prolongue la fase más estricta de la cuarentena en el área metropolitana.

Massa anticipó que convocará para mañana por la tarde a una reunión de jefes de bloque por videoconferencia, en la que propondrá continuar esta modalidad, aunque con una menor presencia de legisladores en el recinto. Para ello insistirá en prorrogar, por otros 30 días, el protocolo que habilita el sistema de funcionamiento remoto, que venció la semana pasada. Desde que se desató la pandemia y se impuso la cuarentena, en la Cámara baja se instauraron sesiones mixtas, en las que una mayoría se conecta desde sus provincias de manera remota, mientras que otro medio centenar de diputados participa de manera presencial en sus bancas.

"Es imposible realizar sesiones presenciales como reclaman en Juntos por el Cambio. El episodio del diputado Sahad lo demuestra: es muy riesgoso", afirman en el entorno de Massa. De hecho, el director médico de la Cámara, Marcelo Halac, recomendó en un comunicado evitar en lo posible las reuniones presenciales en el edificio "por el riesgo de transmisión viral que implican".

Mientras Massa insiste en continuar con las sesiones virtuales, en Juntos por el Cambio anticipan sus reparos. En rigor, en la principal bancada opositora crece el malestar por la dinámica que impone el funcionamiento remoto -que limita el uso de la palabra y acota el debate- y suenan cada vez más fuerte las voces que reclaman el retorno de las sesiones presenciales. Por caso el diputado Fernando Iglesias (Pro) reclama que la comisión de Mercosur, que preside, se reúna de manera presencial, no remota. El gremio de empleados legislativos lo cortó en seco.

"Rechazamos esta y cualquier otra disposición que ponga en riesgo el bienestar físico de los trabajadores legislativos", enfatizó Norberto Di Próspero, jefe del gremio.

La mayoría de los diputados de Juntos por el Cambio, sin embargo, admiten las dificultades de realizar sesiones presenciales en plena pandemia y, aunque no lo reconozcan públicamente, son partidarios de postergar las sesiones remotas hasta que finalice la fase uno de la cuarentena dispuesta por el Gobierno en el área metropolitana.

Massa, sin embargo, insistirá en mantener el Congreso activo con una serie de iniciativas todavía pendientes de tratamiento. En Juntos por el Cambio sostienen que no avalarán una prórroga del protocolo de funcionamiento remoto si en esa agenda de temas a tratar figuran los proyectos más conflictivos que promueve el kirchnerismo.

Entre esos temas figuran la creación de una comisión bicameral para investigar la relación crediticia entre la empresa Vicentin y el Banco Nación, así como también el rechazo a un decreto de necesidad y urgencia del gobierno de Mauricio Macri, que disponía el traslado de la oficina de escuchas judiciales del Ministerio Público Fiscal a la Corte Suprema.