Críticas por la falta de respuesta ante la inseguridad, el nuevo foco de conflicto entre la Provincia y la Nación

Las diferencias por la seguridad entre Nación y la provincia de Buenos Aires suman un nuevo capítulo a la tensión reinante dentro del oficialismo. Desde la provincia gobernada por Axel Kicillof son contundentes a la hora de hablar de sus reclamos a Nación, por entender que la articulación no está funcionando.

En la provincia de Buenos Aires sostienen que la mesa de coordinación por el tema no funciona y, aunque reconocen que la situación actual con Aníbal Fernández a la cabeza, es mejor que cuando estaba Sabina Frederic a cargo del Ministerio de Seguridad (con quien el ministro bonaerense, Sergio Berni, ni siquiera hablaba), aún faltan respuestas. “Diálogo hay todo lo que quieras, buena relación también, pero los gendarmes no aparecen”, apuntan desde las filas del gobierno de Kicillof.

“No hay coordinación porque no hay qué coordinar”, remató una fuente con sede en La Plata respecto de lo necesario para combatir la inseguridad en el conurbano bonaerense. “Lo que estamos pidiendo es algo concreto, que se reedite el Plan Centinela”, agregan desde allí en referencia al que se implementó en 2015, en tiempos en los que Berni era secretario de la cartera a nivel nacional. “Estaban en las calles, en los barrios. Se veían”, detalló una de las voces consultadas por La Nación.

Desde el gobierno bonaerense aseguran que los pedidos de gendarmes se reeditan “todos los días” y agregan que el malestar no es sólo de ellos sino también de los intendentes del conurbano. “Ellos (por los intendentes) primero hablaban con el gobierno nacional, pero ahora están todos a los insultos, porque no les dan respuestas”.

De hecho un importante grupo de intendentes del conurbano se reunieron a fin de marzo y emitieron un comunicado en el que expresaban su preocupación por el tema. Dijeron allí que la inseguridad “es un tema mencionado siempre en cada conversación por los vecinos y vecinas” y le pidieron al gobierno bonaerense y a la Casa Rosada que los “convoque a una mesa de trabajo para junto con los municipios enfrentar este problema que tanta angustia genera”.

Consultados por La Nación, desde el Ministerio de Nación aseguraron que el ministro “tiene permanentes reuniones con intendentes y los está ayudando sobre todo en el sistema de monitoreo de cámaras y asistencia de tecnología para seguridad”. Al tiempo que resaltaron que “en ningún momento hubo quejas con el tema de Gendarmería, ni una queja generalizada”. Tras lo que completaron que “el problema es que las fuerzas federales se ocupan de las delitos federales. la orden para que actúen la da la justicia y que “Gendarmería no puede ocupar el rol de las fuerzas provinciales”.

Ese también es parte del reclamo de provincia que sostiene que los gendarmes enviados el año pasado, “no están en los barrios” sino en “las estaciones de tren” que “son nacionales, no provinciales”, consignaron.

Pese al escenario y las quejas, desde la provincia se jactan de haber logrado bajar los índices de inseguridad entre 2021 y 2019 (no se compara con 2020, por la situación de excepcionalidad marcada por la extensa cuarentena implementada por el Ejecutivo Nacional), de acuerdo a un informe de la Procuración General de la provincia.

“Con gendarmes estaríamos más tranquilos. El problema principal está en las calles. Estamos sobrecargados con la policía provincial. Más gendarmería no soluciona el tipo de delito, pero va a ayudar”, detallan. “Porque 5000 gendarmes en el conurbano no es nada, pero te para la violencia”, completaron. Agregan también que eso les da la posibilidad de hacer seguridad ciudadana y que eso se puede potenciar con el uso de las pantallas de control.

Al tiempo que también orientan las principales críticas al Poder Judicial. Creen que allí el principal problema de la inseguridad reinante. “Si los jueces siguen dejando que los delinquen entren por una puerta y salgan por la otra, todo va a seguir complicado, por más que agarremos delincuentes”.

En tanto que desde Nación reconocen que hoy, en materia de inseguridad, el mayor problema está en la provincia de Santa Fe más que en el conurbano. “Es el distrito más serio hoy, no sólo por el narcotráfico, hay un aumento del delito allí” , explican y agregan que por eso hubo quejas públicas de los intendentes de Rosario y Santa Fe.