En medio de la negociación con el FMI y las dificultades en el Congreso, el Presidente y Cristina Kirchner se reunieron en Olivos

Antes del cierre del año, cuando restan definiciones de altísimo voltaje como el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y ante la certeza de que el Congreso se transformó en un escenario complejo para el oficialismo, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner se reunieron ayer por la tarde en la quinta presidencial de Olivos.

En el encuentro, según confiaron fuentes oficiales, el Presidente y la expresidenta repasaron la “agenda de trabajo” del gobierno nacional, aunque no dieron detalles de los temas que debatieron.

Así, el jefe del Estado y Cristina Kirchner se reencontraron 11 días después de haber compartido el acto en Plaza de Mayo por el Día de la Democracia y los Derechos Humanos, con la presencia también de los exmandatarios de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva; y de Uruguay, José Mujica.

La reunión se produjo horas antes de que el Fondo dé a conocer la evaluación sobre el préstamo que le otorgó al expresidente Mauricio Macri por 44.000 millones de dólares. Una vez que el informe tome estado público la estrategia de la Casa Rosada será salir a criticar con dureza la política económica que impulsó Macri.

Entre los temas que habrían abordado Fernández y Cristina Kirchner también está la relación con la oposición. Según coincidieron desde distintas terminales del poder del Frente de Todos, el vínculo con Juntos por el Cambio será cada día más complicado. Ese es el diagnóstico que esbozó el privado el Presidente tras el fracaso del presupuesto y el debate por bienes personales que, si bien el oficialismo logró imponer su proyecto, el tema lo instaló la oposición.

Menos de 24 horas después de su visita a la residencia oficial, la vicepresidenta cargó contra la Justicia, un tema recurrente. “¡Llegó Papá Noel!”, tuiteó Cristina Kirchner, en referencia a la decisión de la Cámara Federal porteña que revocó los procesamientos de una veintena de acusados por el delito de asociación ilícita, incluido Gustavo Arribas, exjefe de la AFI.

Con un tono irónico describió el fallo como un “regalito de navidad para Macri y su pandilla”. Y, a modo de queja, exclamó: “¡Mamita!”. Según escribió en redes sociales, “ayer, la Cámara Federal de Comodoro Py que, durante cuatro años, con Bruglia -el camarista puesto a dedo por Macri- como personaje estelar, decía que yo era la jefa de ¡4 asociaciones ilícitas! -disparate jurídico-, ¡y que, además, en una de ellas estaban incluso mis hijos!”.

Y continuó: “Ahora dice, en tándem con el camarista Llorens -el que visitaba a Macri en Olivos-, que Mauricio Macri como presidente, Gustavo Arribas como titular de la AFI y Silvia Majdalani como su subdirectora No tienen nada que ver con el espionaje que desde la AFI -que depende directamente de la Presidencia de la Nación- hicieron sobre mí, sobre opositores políticos, sobre dirigentes sindicales y hasta sobre miembros de su propia fuerza política”.

“O sea que los agentes de inteligencia de la AFI utilizaron recursos y logística del organismo para espiar todos y cada uno de los objetivos que sólo le interesaban al mismísimo Mauricio Macri… pero él, su amigo [Gustavo] Arribas y su socia [Silva] Majdalani no sabían nada y no tienen nada que ver. ¡Andá!”, apuntó, y cerró: “Regalito de navidad de dos jueces de la Cámara Federal de Comodoro Py para Macri y su pandilla. ¡Mamita!”.

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