Gobernadores peronistas intentan ganar fuerza para negociar fondos con Macri
Ocho jefes provinciales se reunieron en Buenos Aires; reclaman moderar el ajuste que exige el Gobierno
Para afuera, expresiones como "federalismo auténtico" y "gobernabilidad". Hacia adentro, otras menos pomposas y más prosaicas, como "cubrir el déficit", "suavizar el ajuste" y "presionar por el reparto".
Los ocho gobernadores peronistas que se reunieron ayer en Buenos Aires están preocupados por las finanzas de sus provincias o, más directo, por la plata con la que contarán de cara a las elecciones.
El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, recibió en la casa de su provincia a sus pares Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manzur (Tucumán), Domingo Peppo (Chaco), Sergio Casas (La Rioja), Hugo Passalacqua (Misiones), Lucila Corpacci (Catamarca) y Rosana Bertone (Tierra del Fuego). La novedad fue la presencia del vicegobernador de Santa Cruz, Pablo González. Compartieron el almuerzo: carne con papas y verduras, y postre de chocolate con banana.
Alicia Kirchner no suele sumarse a los cónclaves peronistas. La crisis grave que atraviesa la provincia patagónica la decidió a mandar a su segundo en busca de apoyo.
Después de que cada uno expusiera la situación de su provincia, pasaron al plato fuerte: la necesidad de definir una estrategia común para abordar los acuerdos fiscales (planes de ajuste) que impulsa el Gobierno para reducir el déficit de las provincias.
"La baja del déficit que propone el Gobierno se puede hacer, pero no en la medida que nos piden. Los ingresos no crecen", deslizó a LA NACION uno de los comensales.
Durante el almuerzo se escuchó más de una queja por el "privilegio a los municipios amigos" en el reparto oficial de fondos, viviendas y obras.
En la Casa Rosada le restaron importancia a la reunión. La interpretaron más como un gesto político para diferenciarse del kirchnerismo que como una cita de catarsis por asuntos financieros.
Es cierto que los gobernadores pretenden convertirse en un polo de poder para tallar en el armado electoral del PJ. Pero lo mismo se habían propuesto el año pasado, después del "triunfo" en la discusión por el impuesto a las ganancias. Volvieron a reunirse a principio de año para actuar en tándem ante la paritaria docente, pero a la hora de hacer las cuentas, cada uno se arregló como pudo. La nueva iniciativa podría correr la misma suerte.