"Narbay": cómo está la casa de Alfredo Yabrán en Pinamar a 21 años del crimen de Cabezas

“Narbay”. Yabrán al revés. Así se llama la casa de ladrillos a la vista y techo a dos aguas donde pasaba sus veranos, hace 21 años, el autor intelectual del asesinato de José Luis Cabezas. El empresario lo había advertido: capturarlo en una imagen era “como pegarle un tiro en la cabeza”. Y así murió José Luis, con dos tiros en la cabeza porque le tomó a Alfredo Yabrán una foto de frente que se publicó en la tapa de la revista Noticias del 3 de marzo de 1996.
La casa donde Cabezas hizo guardia varias veces en la cobertura de la temporada de verano de 1997 permanece intacta. Es de los herederos de Yabrán, que viven en Uruguay y administran los bienes que dejó su padre a la distancia. Aunque años anteriores fue ocupada por distintos huéspedes, este enero las cortinas de Narbay permanecen bajas.
El viejo chalet sigue allí, casi oculto en pleno centro de Pinamar. Para llegar desde la avenida principal, Bunge, hay que escalar dos cuadras por la empinada De Las Ballenas. El año pasado, un vecino envió una carta al Concejo Deliberante para pedir que se cambiara la denominación de la calle a “José Luis Cabezas”, pero la familia estuvo en desacuerdo porque consideró que “no tenía sentido”. Se lo hizo saber a las autoridades y la idea no prosperó.
Hoy, como si el tiempo no hubiera pasado, el chalet donde el empresario pasaba sus veranos en los 90 luce tal cual aparece en las viejas páginas de los medios gráficos que cubrieron el crimen en el ‘97: con el pasto podado y bien regado y las flores saludables, aunque con las cortinas bajas.