Prisión perpetua a Díaz Bessone por la represión ilegal
Lo condenaron por crímenes de lesa humanidad
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PARA LA NACIONJosé E. Bordón
SANTA FE.– El ex jefe del II Cuerpo de Ejército Ramón Genaro Díaz Bessone , uno de los emblemas de la represión ilegal durante la última dictadura militar, fue condenado a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad . El fallo también incluyó a otros militares y ex policías sentenciados a penas de entre 10 y 25 años de cárcel.
La medida fue dictada en Rosario por el Tribunal Oral Federal N° 2 a raíz de delitos que fueron cometidos en el Servicio de Informaciones de la ex Jefatura de la Policía de esa ciudad.
El ex comisario Rubén Lofiego también fue condenado a prisión perpetua. Los ex policías Mario Marcote, Ramón Bergara y Carlos Scorteccini recibieron penas de 25, 12 y 10 años de prisión, respectivamente. El único civil imputado, Ricardo Chomicky, fue absuelto. La resolución de los jueces Otmar Paulucci, Jorge Venegas Echagüe y Beatriz Caballero de Barabani establece que todos los condenados irán a una "cárcel común", a excepción de Díaz Bessone, que argumenta tener problemas de salud.
Esta fue la primera condena que recibe Díaz Bessone (86 años), uno de los militares de mayor peso durante la dictadura. Fue ministro de Planeamiento de Jorge Rafael Videla.
Por el centro clandestino que funcionó en el Servicio de Inteligencia pasaron durante la represión ilegal más de 2000 personas, de las cuales más de 300 continúan desaparecidas.
Agrupados en el espacio Juicio y Castigo Rosario, y tras la multitudinaria movilización del sábado para repudiar el golpe militar de 1976, organismos de derechos humanos convocaron "a los rosarinos a ser parte de una jornada histórica".
La conocida como "megacausa Feced" (por un ex jefe de policía rosarino) es de uno de los expedientes de mayor magnitud en Rosario y la región. Una parte es la que está en juicio oral, pero restan una denominada causa residual y una tercera etapa.
El expediente completo tiene cerca de 100 cuerpos de 200 fojas cada uno. El proceso comenzó el 21 de julio de 2010 y tenía previsto terminar en julio de 2011, pero se extendió por un año y ocho meses.
En los expedientes que todavía están en instrucción, a cargo del juez Marcelo Bailaque, hay 16 represores procesados recientemente, entre ellos Jorge Rafael Videla, Lucio Nast, Alfredo Sotera, Eugenio Zitelli, Antonio Tuttolomondo y Julio Fermoselle, entre otros.
La historia de esta investigación tiene un pasado lejano. Un grupo de víctimas del terrorismo de Estado presentó el primer hábeas corpus que tuvo una respuesta favorable de la Justicia en 1984.
En ese año se abrió el expediente en los tribunales provinciales y comenzaron a presentarse los primeros testimonios. En 1985 se hizo el juicio a las Juntas Militares, pero la causa judicial en Rosario quedó en vía muerta cuando fueron sancionadas, durante el gobierno de Raúl Alfonsín, las leyes de punto final (en 1986) y obediencia debida (en 1987).
El fallo -con la disidencia de Venegas Echagüe- rechazó investigar por falso testimonio a la jueza Laura Cosidoy, quien fue testigo de esta causa y está acusada de haber colaborado con la dictadura en lugar de haber cumplido su rol de defensora oficial de las víctimas.
El gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, que presenció la audiencia en la que se leyeron las condenas, afirmó que la sentencia "demuestra cómo ha avanzado la Argentina desde el inicio de la democracia". Y dijo que los progresos son "en primer lugar, en cuanto a la conciencia colectiva, y en segundo, porque en ningún lugar del mundo se llevan adelante juicios de estas características".
Para Bonfatti, hoy [por ayer] fue "un día histórico para la provincia de Santa Fe porque ésta era la causa por delitos de lesa humanidad más emblemática de la ciudad de Rosario y su zona de influencia, por la cantidad de casos que se juzgan".
Bonfatti estuvo en la sala al igual que su antecesor Hermes Binner y el presidente del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria, Agustín Rossi. El legislador dijo: "Estamos muy conformes con las dos primeras sentencias contra Díaz Bessone y Lofiego. Sobre las otras, tenemos una mirada distinta".
Si bien la gran mayoría de testigos, familiares y abogados destacaron la importancia de la condena al general Díaz Bessone, hubo espacio para otras voces. La madre de Plaza de Mayo Herminia Severini se fue muy molesta. "Si todos están acusados de delitos de lesa humanidad no puede haber tantas diferencias. Lesa humanidad es una misma cosa, pero aplican todo tipo de vericuetos para cambiar la situación."
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