2011 fue un año de mucha actividad para nuestro sector. Por un lado, aquellos proyectos en ejecución continuaron su marcha, y por el otro, se confirmó el inicio de nuevas obras. Al tratarse de un año signado por las elecciones presidenciales, se presentaron algunas dudas que se fueron disipando luego de las elecciones primarias.
Muchos de los interrogantes fueron despejados con el resultado de las urnas y el posible y claro resultado de octubre, lo que generó un clima de certidumbre frente a la elección de un nuevo gobierno y contribuyó en la toma de decisiones, lo que permitió que el mercado no sufriera grandes variaciones en los últimos meses del año.
Otro suceso que se presentó y contextualizó las políticas económicas fue el cambio en la metodología en la compra de dólares. Los desarrolladores, en general, firmamos boletos en donde existe una cláusula que permite pagar en dólares al cambio oficial de la fecha.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) manifestó en su último informe que el sector mantuvo su ritmo de expansión tanto en obras privadas como en obras públicas. Por consiguiente, podemos afirmar que nuestro sector fue uno de los impulsores de la actividad económica y del empleo durante 2011.
El balance final es positivo, por lo que nos enfrentaremos a un 2012 con perspectivas de crecimiento. Los precios se mantendrán en los valores actuales y la diferenciación se encontrará marcada por lo que cada desarrollador le coloque a su emprendimiento. Esperamos cambios en el otorgamiento de créditos; modificaciones que se relacionen con la generación de líneas más accesibles no sólo para los clientes finales sino también para las empresas constructoras. A nivel institucional, este año la CEDU cumplió 10 años de labor y las metas planteadas fueron cumplidas. Somos desarrolladores y constructores de la vivienda de los argentinos. Para 2012 procuramos seguir brindando un soporte institucional a nuestros miembros y a la sociedad en general.
Creemos que es fundamental que se generen oportunidades. Trabajaremos para que la clase media pueda adquirir préstamos con cuotas redeterminadas por un índice amigable y para que los empresarios encaremos más proyectos.
El autor es presidente de la CEDU
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