Más allá de consumirla en las clásicas ensaladas, esta hortaliza puede disfrutarse asada o en muffins aptos para celíacos. Descubrí sus potencialidades con estas propuestas.
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Las remolachas son uno de los frutos por excelencia del invierno, y si bien se consiguen todo el año en las verdulerías, es sabido que consumir hortalizas de estación redunda en beneficios como un mejor sabor de los productos y a precios más económicos. Por eso, en esta nota te dejamos dos ideas para aprovechar este tubérculo tan noble, con recetas de Pía Fendrik.
Muffins de remolacha y chocolate
Para 8 porciones
Ingredientes
250 g de remolachas ralladas; 3 huevos; 100 g de azúcar integral; 50 g de cacao semiamargo; 60 g de harina de almendras; 125 g de crema; 80 g de harina de maíz mote o harina paraguaya; 1 cdita. de esencia de vainilla; 2 cditas. de polvo para hornear; 200 g de chocolate con leche; 100 g de crema.
Preparación
- Mezclar la remolacha con los huevos, el azúcar, la esencia de vainilla y la crema.
- Por otro lado, mezclar la harina de almendras con la de maíz, el cacao y el polvo de hornear.
- Integrar ambas preparaciones y verter en moldes de muffins.
- Picar el chocolate, calentar la crema a punto de ebullición y verter sobre el chocolate.
- Dejar reposar 2 minutos y mezclar.
- Una vez que tome cuerpo decorar los muffins.
Estos muffins los pueden disfrutar los celíacos o personas intolerantes al gluten.
Remolachas asadas
Para 8 porciones
Ingredientes
1 kg de remolachas; 2 cdas. de aceite de oliva; 250 g de ricota; sal; pimienta; 2 cdas. de ciboulette picada; 1 cda. de cilantro picado; 1/2 cda. de menta picada; 20 g de queso parmesano rallado; ralladura de 1 limón; 30 g de confitura de tomates
Preparación
- Lavar las remolachas con una esponjita de metal para sacarles toda la tierra.
- Cortar las remolachas en cuartos y ponerlas en una placa para horno, rociar con aceite de oliva, sal y pimienta.
- Cocinar durante 1 hora o hasta que estén bien tiernas. Va a depender del tamaño de las remolachas.
- Escurrir muy bien la ricota y mezclar con la sal, el aceite, las hierbas, la ralladura del limón y el queso parmesano.
- Colocar en un molde aceitado, presionar muy bien y desmoldar.
- Servir las remolachas junto con la ricota y la confitura de tomates.
Si sumás otras variantes, como zanahorias, batatas, calabazas y membrillos, tendrás una fuente colorida de verduras asadas.