En Fuerte Apache: mataron a balazos a un hijo de uno de los Doce Apóstoles, el grupo que lideró el motín más sangriento

Un hijo de Marcelo Brandan Juárez, uno de los Doce Apóstoles, el grupo que lideró el motín de Sierra Chica, el más sangriento de la historia carcelaria argentina ocurrido en la Semana Santa de 1996, fue asesinado de dos balazos en el interior del barrio Ejército de los Andes, conocido popularmente como Fuerte Apache, en Ciudadela, en el partido de Tres de Febrero.

En el ataque, protagonizado por dos sicarios que circulaban en moto, otros tres personas fueron heridas de bala.

El hecho ocurrió en una plaza ubicada frente al nudo 7 del barrio Ejército de Los Andes. Voceros policiales citados por la agencia de noticias Télam informaron que, en circunstancias que aún se intentan determinar, por el lugar pasaron dos delincuentes en una moto y comenzaron a efectuarles disparos, para luego escapar.

Jonathan Brandan, de 38 años, recibió dos impactos de bala en el tórax y abdomen. Fue trasladado de urgencia al hospital Carrillo de Ciudadela, pero falleció mientras era operado.

De acuerdo a las fuentes citadas por Telam, la víctima era hijo de Brandan Juárez, de 53 años y conocido como Popó, quien el 30 de marzo de 1996, junto a un grupo de presos que él y otros lideraban, bautizado Los Doce Apóstoles de la Muerte, intentó fugarse del penal de Sierra Chica.

Al frustrarse el plan, se originó un motín que se extendió hasta el 7 de abril, durante el cual mataron a otros presos, jugaron al fútbol con la cabeza de uno de ellos, cocinaron restos humanos en la panadería de la prisión, y hasta tomaron de rehén a una jueza que se presentó para negociar la rendición.

Ayer, tras una llamada al número de emergencias 911, personal de la comisaría 6a. de Ciudadela Norte se acercaron a la escena de los hechos y luego de las primeras averiguaciones identificaron a los posibles tiradores.

En ese marco, efectivos de la seccional, junto a detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) San Martín, aprehendieron a un sospechoso, un joven de 28 años.

Según Télam, el móvil del ataque habría sido una pelea por dos pistolas que el sospechoso prófugo robó y no le pagó a Brandán.

La fiscal Diana Mayko, a cargo de la investigación y titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 de San Martín, cuenta con una serie de testimonios que apuntarían que ese era el conflicto entre la víctima Brandán y el único prófugo, Walter Mansilla.

“Mansilla se llevó dos pistolas de una ‘cueva’ del fallecido Brandán sin pagar. Por eso, lo andaban buscando para tomar represalias y Mansilla se adelantó ayer y atacó a Brandán cuando estaba en la plaza con otras cuatro personas”, explicó a Télam una fuente policial.