Misterio en Puerto Madero: robaron un auto y se llevaron a una niña de ocho años que dormía en el asiento trasero

Malena Fernández tiene ocho años. Hoy, a las 6, dormía en los asientos traseros del auto de sus padres cuando dos delincuentes armados robaron el vehículo en Lavallol, en el partido de Lomas de Zamora. Durante casi cinco horas su paradero fue un misterio y su búsqueda una prioridad para los investigadores. Apareció sana y salva en Puerto Madero.

Así lo informaron a LA NACION fuentes policiales. La niña fue encontrada en Elvira Rawson de Dellepiane al 400, en cercanías del estacionamiento del Casino Flotante de Puerto Madero.

“La niña, que ya se reencontró con su madre, fue trasladada al Hospital Argerich para ser evaluada por especialistas en pediatría y psicopatología”, explicaron fuentes del Ministerio de Seguridad porteño.

Todo comenzó a las 6, en Kurth y Pareta, en Lavallol cuando un hombre salía de su casa en un automóvil Ford Ka y fue interceptado por dos delincuentes armados. Malena, la hija de la víctima, dormía en el asiento trasero.

“Los delincuentes se llevaron el auto y, a las cuatro cuadras, cuando advirtieron que estaba la niña, la dejaron abandonada”, sostuvo a LA NACION una fuente de la investigación.

Una mujer, conocida de la familia de la niña, encontró a Malena y decidió llevarla a Puerto Madero, donde trabaja la madre de la menor, informó voceros al tanto de la investigación.

“El padre no sabía que su hija había sido encontrada por una vecina e hizo la denuncia. Se organizó el operativo de búsqueda de la menor sin saber que la nena estaba en camino con una vecina al trabajo de la madre”, sostuvo una fuente de la policía bonaerense.

El auto robado fue hallado en Monte Grande y personal dela policía bonaerense detuvo a cuatro sospechosos.

La niña apareció cuatro horas después del robo en Puerto Madero, a unos 30 kilómetros del lugar donde se inició el robo.

Según pudo reconstruir LA NACION de fuentes oficiales, después de ser abandonada por los delincuentes, la niña fue caminando hasta su casa, pero como no encontró a sus padres, le pidió ayuda a una vecina.

“La vecina se comunicó con la madre de la niña y arreglaron que la llevara a Puerto Madero, donde la mujer trabaja en un depósito judicial, situado en cercanías del Casino Flotante”, explicaron fuentes de la investigación.

La madre de la niña, Valeria Risoluto, no sabía lo ocurrido con su marido y su hija. Se enteró por su vecina.

“Después de entregarle la niña a su madre, la vecina se retiró de la zona de Puerto Madero, según contó Risoluto”, explicaron fuentes policiales.