La Matanza. Un detenido por el homicidio del referente social que se animó a denunciar a los narcos

Un sospechoso del asesinato de un referente social boliviano que realizaba tareas solidarias en un barrio de la localidad matancera de González Catán y que organizaba a sus vecinos para que se autoprotegieran de las acciones de bandas criminales de la zona fue detenido en las últimas horas del sábado.

Se trata de Jonathan Tapia Guzmán, que fue capturado por efectivos policiales en la localidad de Villa Fiorito, partido de Lanús, acusado del homicidio de René Mendoza Parra, de 78 años, acribillado en la puerta de su casa en el deslinde de Villa Dorrego y el barrio San Cayetano, de La Matanza, el lunes de la semana pasada, un día después de otro crimen conmocionante en ese partido: el del kiosquero Roberto Sabo, baleado en su local del centro comercial de Ramos Mejía.

Voceros judiciales informaron a la agencia de noticias Télam que Tapia Guzmán se negó a declarar ante el fiscal Federico Medone, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática de Homicidios del Departamento Judicial La Matanza.

Quedó imputado por el delito de “homicidio agravado por alevosía en concurso real con homicidio agravado criminis causae en grado de tentativa”, y seguirá detenido.

En tanto, los investigadores seguían buscando a otro acusado del asesinato de Mendoza Parra.

El hecho ocurrió en la noche del pasado domingo en una casa situada en las calles Buenos Aires y Tarija, de González Catán.

Dos hombres llamaron a la puerta; cuando Mendoza Parra abrió, fue atacado a balazos y resultó herido con tres de los 14 tiros que le dispararon, dijeron los voceros.

La víctima cayó al piso y murió poco después, mientras que uno de sus hijos, que estaba junto a él y que fue protegido por su padre para que no lo balearan, resultó ileso, agregaron las fuentes.

Ocho horas antes de ser asesinado, el hombre, que era presidente de la junta vecinal, había participado de una reunión con los vecinos de los barrios Fátima y San Cayetano para hablar del tema de la inseguridad en la zona y de la preocupación por la venta de drogas, que en los últimos tiempos había desatado enfrentamientos entre narcos rivales.

Una de las hipótesis del crimen, según surge de la investigación que lleva adelante el fiscal Medone, es que el ataque se produjo en venganza por las tareas sociales que realizaba Mendoza Parra y por las denuncias de los hechos criminales cometidos en la zona.

En declaraciones al medio El1 Digital, un hijo de Mendoza Parra dijo: “Hicimos la reunión por seguridad y, cuando terminó, vinieron dos pibes a la noche, preguntaron por mi papá y cuando él salió le metieron 14 tiros y se fueron corriendo. Necesito que visibilizar el caso”.

René Mendoza, que lleva el nombre de su padre, concluyó: “No podemos vivir con la incertidumbre de que hoy puede ser nuestro último día de vida”.