Los Bassi, una familia narco exterminada por sicarios en Rosario

ROSARIO.-Cuando Ariel Cantero, alias Guille, se entregó en junio de 2013 profirió una profecía al clan Bassi, sus enemigos en el negocio narco: "Les vamos a entregar los cuerpos sin cabeza. Y no va a quedar ni un pollo en el gallinero". La metáfora avícola tenía que ver con su rival Luis Bassi, alias Pollo. Parece haber cumplido. Entre diciembre de 2013 y octubre de 2014 fueron asesinados en el mismo escenario, la remisería Cinco Estrellas de Villa Gobernador Gálvez, Maximiliano y Leonardo, hermanos, y Luis, padre de Pollo Bassi.

El resto de la familia huyó de Rosario para poder conservar su cabeza, mientras el líder de la banda cumple una condena en la cárcel de Coronda por homicidio, pero fue absuelto en marzo de 2017 del crimen de Claudio Cantero, alias Pájaro.

El sábado a la tarde la profecía volvió a aparecer. Dos sicarios en moto ejecutaron al suegro de Bassi, Eduardo Cisneros, de 70 años y a su pareja Gloria Larrea, de 56. No tuvieron tiempo a reaccionar, porque los disparos les provocaron a ambos la muerte en el acto. Quedaron sentados en sillones donde tomaban mate al caer de la tarde en Grandoli y Gutiérrez, en barrio Municipal, una zona donde el año pasado la disputa territorial entre los clanes de los Funes y Caminos dejó más de 30 muertos.

Unos minutos después se produjo otro asesinato en esa zona, en barrio Las Flores, territorio que dominaron a sangre y fuego Los Monos. Dos sicarios en moto ejecutaron cerca de las 22 a Matías Leonel Gobernatore, de 18 años, un joven oriundo de Villa Gobernador Gálvez.

El viernes a la noche murieron Emilse Sosa, de 16 años, y Miguel Ángel Quintana, de 50, y otras siete personas resultaron heridas de bala, entre ellos tres menores. Milena, una nena de 5 años, recibió un disparo en la cabeza mientras patinaba en la vereda de su casa, y su estado es gravísimo. El ataque lo protagonizaron tres hombres con cascos de moto en sus cabezas que bajaron de un auto armados con ametralladoras y comenzaron a disparar contra una casa. Las balas quedaron incrustadas en varias viviendas. La principal hipótesis es que este ataque demencial es una venganza narco.

En poco más de 24 horas hubo cinco asesinatos en Rosario. Todos con la misma metodología de sicariato, donde los atacantes aparecen fuertemente armados con ametralladoras o pistolas 9 milímetros y cumplen el objetivo de ejecutar en pocos segundos a las víctimas.

Durante las últimas horas se conoció que la justicia federal de Rosario elevó a juicio oral una causa en la que está involucrado Guille Cantero, quien está preso en el penal de Ezeiza, procesado por tramar secuestros extorsivos desde el penal de Coronda, donde estaba alojado anteriormente. En la investigación que realizaron los fiscales Santiago Marquevich y Viviana Saccone determinaron que el líder de Los Monos planeó un secuestro que terminó trunco, junto con otros cómplices que estaban en libertad.

Es el tercer juicio que enfrentará Guille Cantero. En abril pasado fue condenado a 22 años de prisión en la justicia provincial, y luego en diciembre pasado recibió una pena de 15 años de cárcel por producción y comercialización de estupefacientes.