Un policía federal baleó en el barrio de Agronomía a tres aspirantes de la misma fuerza y quedó detenido

Un agente de la división Barrial de la Policía Federal baleó a tres aspirantes de esa fuerza de seguridad federal y fue detenido por policías porteños en el cruce de las avenidas Nazca y Beiró, en el barrio de Agronomía, donde ocurrió el trágico episodio que habría sido desencadenado por una situación de violencia de género.

Según confirmaron fuentes oficiales, el agresor -identificado como Sebastián Vargas Orellana- había mantenido una relación sentimental con una de las víctimas. Esa mujer, identificada como Camila Soledad Juárez, de 26 años, recibió disparos en el muslo derecho y abdomen y fue trasladada con riesgo de vida al Hospital Tornú por una ambulancia del SAME. Es sometida a una intervención quirúrgica y su pronóstico es reservado.

Al lado de Juárez también se encontraba otra aspirante a oficial de la PFA, Cintia Santa Cruz, de 30 años, que resultó lesionada en el ataque al sufrir dos disparos en el abdomen. Al igual que su amiga, su trasladada al Hospital Tornú y derivada luego al Hospital Churruca. Se encuentra fuera de peligro, según la información médica.

En ese ataque también fue herido Ulises Javier González Dos Santos, de 29 años y cadete de la PFA que acompañaba a las mujeres, luego que el policía federal usase su arma reglamentaria para impactar disparos en el tórax y el abdomen de esa víctima. Ese hombre fue atendido en el hospital Zubizarreta, donde llegó luego de ser trasladado en un taxi y derivado luego al Hospital Churruca. Su estado fue calificado como grave.

Al recibirse el aviso sobre el ataque, agentes de la Policía de la Ciudad pertenecientes a la Comisaría Vecinal 15 C interceptaron y detuvieron al agresor, que portaba su pistola 9mm.

Fuentes oficiales confirmaron que el atacante, que no portaba el uniforme de la PFA, se identificó con agente de la fuerza de seguridad federal, dejó el arma en el suelo y se entregó ante los policías porteños.

Vargas Orellana, de 26 años, cumplía funciones como policía barrial, cuerpo que está asignado a la prevención del delito en asentamientos, en el caso de la ciudad de Buenos Aires su presencia quedó limitada a la villa 1-11-14. Los investigadores sospechan que ese policía siguió a sus víctimas y buscan reconstruir sus movimientos con el apoyo de imágenes de cámaras de seguridad.

Si bien sus palabras no pueden ser incorporadas en un expediente, trascendió que Vargas Orellana confesó que disparó contra su expareja y los otros dos cadetes de la PFA. Ese relato, más allá de las pruebas y declaraciones de testigos, deberá ser validado en la indagatoria que será encabezada en las próximas horas por la fiscalía que interviene en el caso.

El agresor habría disparado al ver caminar de la mano a su expareja con el cadete de la PFA, según relataron fuentes oficiales, por lo que el caso sería considerado un intento de homicidio en el contexto de violencia de género.

Al respecto, Miguel, un empleado de un comercio de venta de colchones y sommiers ubicado de la mano de enfrente a la esquina en la que se produjeron los disparos, contó esta tarde al canal de noticias A24 que las víctimas llegaron al lugar a bordo de un taxi y que el tirador ya se encontraba esperándolas ahí.

El hombre se encontraba adentro del local y junto a un compañero vio a “una persona parada en la esquina, esperando que del taxi bajen cuatro personas, que eran dos mujeres y dos hombres”.

“De repente saca un arma y empieza a tirar, les tira a las dos mujeres adentro del taxi y a uno de los hombres de adentro del taxi”, relató Miguel y añadió que escuchó de “seis a nueve disparos por lo menos”.

Tras los balazos, una de las mujeres quedó tendida en el interior de la concesionaria de motos ubicada a pocos metros de la esquina, y la otra escapó a la carrera en dirección opuesta.

”Mirá lo que me hiciste hacer”, detalló Miguel que el acusado le gritó a Juárez apenas terminó de disparar y arrojó su arma al suelo.