Dificultades para conseguir trabajo aunque se haya completado el secundario
En la Ciudad, el 15,8% de quienes tienen entre 15 y 29 años están desempleados; en los barrios del sur, aumenta al 25%
LA NACION
Son aproximadamente 700.000 los jóvenes que tienen entre 15 y 29 años y viven en la ciudad de Buenos Aires. El 15,8 por ciento no tiene empleo, y cuando se trata de los que habitan en el sur del mapa porteño, esa franja aumenta casi al 25 por ciento. Uno de cada 10, además, se incluye en la depreciada categoría de exclusión conocida como "ni-ni" (ni estudia ni trabaja).
Uno de los principales problemas para revertir la situación, según opina Sergio Abrevaya, legislador porteño (GEN) y expresidente del Consejo Económico y Social de Buenos Aires, está en el sistema educativo actual, que no está adaptado a los requerimientos que luego precisarán los alumnos para avanzar en la currícula universitaria o para salir al mundo laboral.
"El proyecto oficial [la secundaria del futuro] considera algunos aspectos que en forma aislada son positivos, pero falta una discusión orgánica para acercar el conocimiento a la realidad de los adolescentes de hoy. Los jóvenes son los que más tardan en conseguir trabajo, no encastran en el sistema".
Hasta el año pasado, Melisa Campuzano, de 19 años, era parte de la estadística de jóvenes desempleados. Había terminado la escuela secundaria y luego, un curso de auxiliar de farmacia. Pero no encontraba trabajo y, a pesar de querer continuar con sus estudios, tampoco recibía ningún otro tipo de formación. Un día, cuenta, se enteró de una beca que ofrecía el gobierno porteño a través de su página de Facebook. Entró y se anotó.
"No me hice ilusiones, y cuando ya me había olvidado del tema, me llegó un mail en donde decía que había quedado preseleccionada", cuenta. Después llegó otro correo, convocándola para una entrevista grupal y luego una personal. A la semana, un tercer correo apareció en su casilla, y allí figuraba su nombre entre los candidatos que finalmente habían quedado seleccionados.
Hoy, Melisa estudia para técnica en laboratorio en el Instituto Superior de Ciencias de la Salud, una especialización con tres años de formación. "Me gusta, estoy contenta", dice la joven, que este año también comenzó a trabajar en Farmacity, primero como recepcionista, por una suplencia de apenas dos semanas, y luego como empleada en la oficina de administración.
"Muchos de mis compañeros también son estudiantes, y en la empresa tenemos flexibilidad con los horarios y días de estudio por examen. Eso también ayuda", comenta.
Melisa vive en González Catán con su familia, y cursa el primer cuatrimestre de su nueva especialización en un instituto de Flores. Pero al esfuerzo diario lo combate pensando también en el futuro. Ella, dice, se imagina como bioquímica.
"Pienso seguir la carrera en la universidad, el objetivo es poder seguir estudiando y graduarme. A muchos de mis amigos les cuesta conseguir trabajo. Salen y dejan currículums, pero nadie los llama. La mayoría terminó el secundario y se quedó ahí. Necesitan trabajar sí o sí y buscan algo que les genere un ingreso. Les digo que no se queden quietos, pero los entiendo. A veces la frustración es tan grande que no dan ganas de seguir", concluye.
#Potenciate Becas y cursos: están dirigidos a jóvenes de entre 15 y 29 años, de todo el país. Para inscribirse hay que ingresar en el sitio potenciate.buenosaires.gob.ar
