El stress debería tomarse vacaciones este verano

Las vacaciones no sólo traen la promesa de un merecido descanso, sino que son el momento elegido para encontrar una solución a aquellos viejos dolores y molestias acumulados durante todo un año de trabajo.

Las contracturas, el bruxismo o el rechinamiento de dientes durante la noche, la imposibilidad de conciliar el sueño, las jaquecas, el nerviosismo constante, la taquicardia, entre otros trastornos, pueden advertir sobre un cuadro de agotamiento.

"Estoy estresado", es una frase que se escucha durante todo el período laboral, pero no siempre se le busca la solución a tiempo. Justamente por la falta de un momento libre, son las vacaciones el momento elegido por muchos para consultar al médico en busca de una solución a un tema que cada vez afecta a más personas.

Los profesionales consultados por La Nación coincidieron en que el stress tiene una de sus principales causas en la tensión laboral. Por tal razón, los trabajadores son los más propensos a sufrirlo, aunque cada vez hay más niños que sufren de este mal del siglo XX.

Muchos doctores manifestaron también que en el período de descanso estival es cuando más consultas reciben, aunque advirtieron que el problema está presente todo el año.

Puede causar la muerte

Alberto Orlandini, médico psiquiatra y profesor de psiquiatría de la Escuela de Medicina de Santiago deCuba, comentó que este año recibió más de 300 consultas por stress: el doble que el año último.

El doctor, autor de "El stress: Qué es y cómo se trata", dijo: "La gente cada día trabaja más y descansa menos".

Jorge Lerman, jefe de cardiología del Hospital de Clínicas y profesor adjunto de la cátedra de cardiología de la UBA, explicó que la excesiva tensión "puede afectar el aparato cardiovascular y producir un aumento de presión y de accidentes cardiovasculares, como infartos, y hasta muerte súbita por stress agudo".

Consultado acerca de las causas de este mal, Lerman las clasificó en laborales, afectivas y personales.

"Las afectivas se refieren a conflictos personales o familiares, y las personales pueden tener que ver con una enfermedad propia o de algún ser querido", comentó Lerman.

Respecto de las consecuencias, Orlandini discriminó entre psíquicas y físicas. "El stress puede presentar síntomas en todos los tejidos del organismo", explicó.

El cansancio, la dificultad para concentrarse y memorizar, la irritabilidad y la reducción del deseo sexual, entre otras, se cuentan entre los efectos psíquicos.

Entre los físicos se encuentran las cefaleas, picazón, constipación, diarrea, tos ansiosa -que no responde a una lesión pulmonar-, úlceras, trastornos digestivos, y más.

Es habitual ver gente que camina con una mano en la zona lumbar o que se esfuerza por relajar sus omóplatos haciendo extraños movimientos ascendentes y descendentes con sus hombros.

La razón de tales contorsiones es que, como explicó Fernando Silverman, profesor titular de consulta del servicio de ortopedia y traumatología del Hospital de Clínicas, "las contracturas musculares son una consecuencia habitual de este mal que sufre mucha gente".

Según el profesional "los trastornos más comunes son las lumbalgias y los dolores cervicales. En estos casos se recurre a fisioterapias y masajes, pero no se cura la enfermedad de fondo, que puede ser el stress".

Más consultas a fin de año

Alejandro Cordero, jefe de Dermocosmiatría del Hospital de Clínicas, dijo que "un alto porcentaje de enfermedades de la piel están empeoradas o, mejor dicho, desencadenadas por el stress. Hay muchas consultas a fin de año, pero el descanso y las vacaciones pueden ayudar a contrarrestar el cuadro".

Cordero manifestó que "cada día hay más gente que sufre de alopecia difusa -pérdida del cabello-. Lo sufren tanto hombres como mujeres".

También es cada vez más común escuchar a gente que se queja por dolor en la zona maxilar. Muchos de ellos sufren tal vez de bruxismo.

Ofelia Corizzo, odontóloga y especialista en disfunsión craneomandibular, dijo que este trastorno consiste en apretar y frotar con fuerza las piezas dentarias superiores contra los inferiores.

Ante la aparente confirmación de que, como dijo Orlandini, "Buenos Aires es una fábrica de stress", el mejor camino parece ser seguir su consejo y "calmarse para priorizar las cosas realmente importantes".

Un recreo a tiempo

El stress no es una condena. El diagnóstico es el primer paso para iniciar un tratamiento que permita contrarrestar los efectos del agotamiento.

La solución básica de la patología puede parecer fácil, pero conlleva todo un cambio de actitud.

Los profesionales consultados por La Nación recomendaron, además de un tratamiento adecuado, comenzar por relajarse. Unas vacaciones a tiempo pueden convertirse en un gran aliado para dar por tierra con la tensión.

El cardiólogo Jorge Lerman explicó: "Primero hay que enseñarle al paciente a cambiar patrones de conducta. A veces algunos malos hábitos están muy arraigados, pero hay que ayudar a la persona a priorizar las cosas realmente importantes".

Asimismo, el psiquiatra Alberto Orlandini coincidió: "El médico tiene que trabajar sobre el estilo de vida del paciente. Este debe dormir las horas necesarias y evitar jornadas laborales que sobrepasen las nueve horas de trabajo, ya que esto es nocivo para su organismo."

La actividad física y la práctica deportiva también fueron aconsejadas insistentemente por los doctores. Para quienes no pueden hacer grandes esfuerzos se recomendó el yoga.

"Se debe aprender a darle importancia a las horas de recreación que sirven para relajarse y son necesarias para mantener un equilibrio", agregó Orlandini.

Por Marilina Esquivel

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