Inauguraron la renovada estación Retiro del tren San Martín

Esta mañana se reinauguró la estación Retiro de la línea San Martín, luego de varios meses de refacciones y 200 millones de pesos de inversión. Hoy luce totalmente renovada y deja atrás muchos años de decadencia, sobre todo si se la comparaba en el último tiempo con las estaciones vecinas del tren Mitre y el Belgrano. Por esa estación transitan más de 30.000 pasajeros por día.

"Quedó muy, muy linda. Así da más placer llegar y encarar la jornada laboral. Igual, a mí, lo que más me importa es la frecuencia de los trenes y que llegue a horario", dijo Cecilia Bussi, de 41 años, una de las 125.000 personas que usan a diario este servicio que une Pilar y Retiro.

La estación estuvo cerrada desde mayo de 2018 hasta el 22 de julio pasado, que volvió a abrir, pero con varias limitaciones para la circulación de los pasajeros. Estos arreglos forman parte de la completa renovación de la línea que incluyó un viaducto ferroviario que eliminó 11 barreras y abrió 11 calles.

Todavía predomina el olor a pintura y se puede ver a los obreros que van de un lado a otro para terminar de ajustar lo últimos detalles. La fachada de la intersección de avenida Ramos Mejía y Padre Mugica, así como las veredas de acceso al hall principal, fueron restauradas conservando el valor histórico y patrimonial. Además, se remodelaron las boleterías, los techos, construyeron una sala de preembarque exclusiva para los servicios de larga distancia y un nuevo centro de atención al pasajero (CAP). También cambiaron los baños, la iluminación y se reubicaron las pantallas con información para el pasajero.

"Me sorprendió la ciudad. Yo soy de la provincia, hace mucho que no pasaba por acá. Esto está totalmente renovado. La estación está muy linda, luminosa, limpia. Nosotros hoy vamos de Retiro a Palomar, para luego tomar un avión a Bariloche", dijo Juan Pablo Galarza, de 37 años, que estaba junto a su hijo Martiniano, de 16.

El lugar también contará con cinco locales comerciales: una pizzería, un maxikiosko, una cafetería, un local de comidas rápidas y un local de lotería, que aún están en construcción y, según fuentes del Ministerio de Transporte, abrirán en octubre.

Marcelo Molini, de 44 años, dijo: "Otra cosa. La anterior parecía que se te iba a caer encima. Está muy linda. Ahora, a seguir mejorando los trenes y el servicio en general".

"Es un gran avance. La verdad que está muy buena la estación. Esta venía media opacada frente a las otras estaciones. Lo que me parece muy bueno es que va a haber locales comerciales de buenas marcas. Antes había locales menos interesantes o directamente puestos informales", dijo Alejandro López, de 39 años, que se bajó del tren en Retiro y venía de Bella Vista.

Los andenes también fueron intervenidos. Se trabajó en la renovación de toda la iluminación –se instaló tecnología led para disminuir el consumo de energía– y colocaron pisos nuevos con un especial señalamiento para personas con visión reducida y nuevos bancos para que el pasajero espere el tren con mayor comodidad. En cuanto a lo estructural, hay nuevos refugios que optimizan el desagüe de la estación en caso de lluvias.

"Esto es parte del plan de recuperación integral de los trenes del área metropolitana. Las tres estaciones estaban en muy mal estado, la del Belgrano, Mitre y San Martín. Esta última es una estación de 1912, que nunca tuvo un trabajo integral y hoy está completamente nueva. No solo los interiores, sino también el espacio público. Va a haber cinco locales, que es lo único que resta en la construcción, pero que ya se licitaron y van a ofrecer servicios de primer nivel. Esto se suma al viaducto del San Martín y a toda la mejora que estamos haciendo", dijo Guillermo Dietrich, ministro de Transporte de la Nación.

La estación tiene una larga y desafortunada historia. En 1930 un incendio devoró parte del edificio que recién fue reconstruido en 1970. Desde entonces, arrastra problemas estructurales y, aunque fue declarado patrimonio histórico en 1982, el Estado tuvo que demoler casi la totalidad de la estructura para poder reformarla.

Fotos: Fernando Massobrio

Edición fotográfica: Fernanda Corbani