La explicación científica detrás de los ruidos y movimientos que hacen los cadáveres
Luego de la muerte, puede ser normal que los cuerpos emitan sonidos o tengan reacciones
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El video de una persona, aparentemente “despertándose” en una morgue de Rusia, circuló por Internet en los últimos días. Muchos dijeron que se trataba de un muerto que habría vuelto en sí y habría retomado sus movimientos. Sin embargo, el metraje fue calificado como falso por el Ministerio de Salud de ese país, según reseñó el canal local Ren TV. ¿Puede un muerto moverse y emitir sonidos como gritos? Esto dice la ciencia.
Cuando una persona es declarada como muerta, la funeraria se encarga de llevarla a una morgue para acondicionarla, vestirla, maquillarla e introducirla a un ataúd para la posterior celebración eucarística, entierro o cremación.
El proceso de arreglar un cuerpo incluye la aplicación de unos líquidos como el formaldehído para que “el difunto se vea menos demacrado”, afirmó Karen Koutandos, embalsamador, en diálogo con el diario británico The Guardian. Luego, se deben drenar los líquidos corporales y eliminar los gases que pueden producir un mal olor.
“Hago una incisión justo debajo de la caja torácica e inserto una herramienta de succión de metal, conocida como trocar, conectada a una bomba de succión. Luego, pincho los órganos internos para drenar el líquido”, reveló Koutandos. Justo cuando se utiliza el trocar -el instrumento quirúrgico que se asimila a una puntilla acompañada de una cánula- el individuo genera sonidos, pues se le están retirando los gases.
“Ese gas va a buscar una salida natural. En este caso busca la vía por donde nosotros hablamos y puede emitir algún tipo de sonido. Son casos muy raros”, aseguró otro experto al noticiero mexicano Azteca. De esta manera, se puede afirmar que los cadáveres no gritan, sino que los sonidos que emiten son los gases saliendo del cuerpo.
¿Los cadáveres se mueven?
Ahora bien, respecto al movimiento de los cadáveres, la investigadora de ciencias forenses Alyson Wilson y sus colegas australianos filmaron la descomposición de un cuerpo en intervalos de 30 minutos durante 17 meses para la investigación Experimental Tafonómica en Nueva Gales del Sur.
Al comenzar este experimento, el cadáver se encontraba en una posición recta en donde sus brazos estaban pegados al cuerpo. Al finalizar, sus extremidades superiores estaban abiertas hacia los lados. “Creemos que los movimientos se relacionan con el proceso de descomposición a medida que el cuerpo se momifica y los ligamentos se secan”, señaló Wilson en la agencia internacional AFP.
Esta observación de los movimientos de los cadáveres es clave para la policía, que asume que la posición en la que se halla un cadáver es la misma que tenía en el momento de fallecer, a menos que se compruebe que fue movido intencionalmente. Por ejemplo, si una persona muere de sobredosis se espera hallar sus manos cerca de una jeringa o de la droga.
“Pero debido a los movimientos post mortem, las manos pueden haberse movido bastante lejos de la jeringa. Y eso podría llevar a una interpretación errónea de la causa de muerte”, afirmó Wilson en el medio citado.
Así, el movimiento y ruidos que hacen los cadáveres no se debe a algo paranormal, sino que en realidad hay razones científicas como el movimiento post mortem y la eliminación de gases corporales que justifican que ocurran cosas como estas.
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