Renuncias por la crisis en la seguridad

LA PLATA.- La hipótesis de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, que señaló que la policía provincial habría fraguado tiroteos para "blanquear" 60 asesinatos de menores que habían denunciado apremios policiales, precipitó ayer el relevo de dos ministros del gabinete del gobernador Carlos Ruckauf.

Los titulares de la cartera de Seguridad, Ramón Oreste Verón, y de Justicia, Jorge Casanovas, fueron reemplazados por el intendente de Hurlingham, Juan José Alvarez, y por el asesor general de la Gobernación, Antonio Arcuri, respectivamente.

Ayer, los dos funcionarios prestaron juramento en la gobernación bonaerense.

También renunció el titular de Educación, José Octavio Bordón, que será reemplazado por el subsecretario de Educación provincial, Mario Oporto. Tendrá que esperar hasta el miércoles próximo para asumir, cuando el Senado provincial confirmará su designación.

La separación de Verón, según fuentes oficiales, estaba prevista para la semana próxima, pero debido a la denuncia de la Suprema Corte de Justicia el recambio se adelantó.

"Estoy poniendo a un intendente exitoso, que sabe de seguridad y que va trabajar sobre una descentralización de la policía para mejorar la lucha contra el delito", explicó el gobernador Ruckauf.

Cumplir la ley

En diálogo con LA NACION, el flamante ministro de Seguridad Alvarez, aseguró: "La policía bonaerense va a respetar las leyes a rajatabla. En las próximas horas me reuniré con los miembros de la Corte". Además, Alvarez adelantó que en los próximos días podría haber modificaciones en la cúpula de la policía por la denuncia del máximo tribunal provincial y aclaró que el lunes comenzará a entrevistarse con los jefes policiales.

"Voy a comunicarles quién se queda y quién se va, de acuerdo con la evaluación que voy a hacer en estas horas", afirmó Alvarez.

La llegada de un civil para manejar las riendas de la bonaerense pareció disgustar a las altas autoridades policiales que ayer después de que los nuevos ministros juraron, se retiraron de la gobernación.

Aldo Rico, que estuvo a cargo de la fuerza de seguridad provincial y que ayer asistió al acto de asunción, fue uno de los pocos funcionarios que recibieron un saludo de venia de los policías presentes.

Por su lado, Verón dijo que Ruckauf tenía que hacer un cambio de ministro no porque su gestión hubiese fracasado en Seguridad, sino porque luego de casi dos años al frente de esta cartera "se produce un desgaste que obliga a una necesaria oxigenación".

El ex ministro consideró además que el hecho de que un civil sea su sucesor "no implica cambios de política de fondo".

Las afirmaciones de Verón fueron ratificadas por el propio gobernador, que relativizó el hecho de que un civil volviese a estar al frente de la fuerza policial. "El jefe de la policía va a seguir siendo el mismo", dijo en referencia al comisario Amadeo D«Angelo.

El recambio en el Ministerio de Justicia había sido anticipado, porque el saliente Jorge Casanovas fue elegido diputado nacional y, en diciembre próximo, tendrá que asumir su banca en el Congreso de la Nación.

Arcuri dijo a LA NACION que el gobernador le encargó "acercar la Justicia a la gente, ser solidario con las víctimas y que los delincuentes estén en las cárceles, para seguridad y no para castigo y tormento de ellos".

Otros cambios

El subsecretario de Justicia, Carlos Martínez, en tanto, ocupará el cargo dejado por Arcuri en la Asesoría General del gobierno provincial.

Ayer también se renovó la Secretaría de Ingresos Públicos. Su titular, Saúl Bouer, fue reemplazado por Néstor Giallombardo, que se desempeñaba como director de administración del Ministerio de Economía. Además, se confirmó el alejamiento de Carlos Bedetta de la Dirección de Rentas.

Ruckauf aseguró que decidió los cambios en su gabinete porque, después de hacer un balance, advirtió que algunos de sus ministros habían cumplido un ciclo. "Llega un momento en que es necesario producir cambios que están vinculados con etapas que para mí se cumplieron", concluyó.

El acto de asunción realizado ayer en el Salón Dorado fue anunciado con pocas horas de anticipación y resultó caótico. La innumerable cantidad de invitados de cada nuevo ministro restó lugar a funcionarios y periodistas que, en determinados momentos, se insultaron y empujaron.

Los nuevos ministros y secretarios

• Juan José Alvarez, ministro de Seguridad. Cuando León Arslanian estaba a cargo de la cartera de Seguridad, se desempeñaba como subsecretario de Relaciones con la Comunidad. Desde mayo de 1999 hasta ayer fue intendente de Hurlingham, donde promovió un plan de seguridad llamado Policía Vecino, por el que 60 agentes que se distinguían por sus prendas anarajandas recorrían los barrios para profundizar el diálogo con los habitantes. Entre 1989 y 1995 fue superintendente nacional de Fronteras, en el Ministerio de Defensa, y subsecretario de la Función Pública de la Presidencia de la Nación.

• Antonio Arcuri, ministro de Justicia. Hasta ayer, Arcuri se desempeñaba como asesor general de Gobierno, cargo que había asumido en diciembre de 1999. Antes había presidido por seis años el Ente del Conurbano bonaerense, durante la gobernación de Eduardo Duhalde. Aún se tramita una causa judicial en la que fue acusado por diputados frepasistas por sobreprecios. Nació en San Vicente el 10 de junio de 1947. La intendencia de ese distrito está a cargo de su esposa, Brígida Malacrida.

• Mario Oporto, director general de Cultura y Educación. La designación de quien era el número dos de José Bordón debe ser aprobada por la Legislatura bonaerense. Es profesor y licenciado en Historia. Entre 1992 y 1998 desarrolló funciones en la Subsecretaría de Formación Profesional del Ministerio de Trabajo de la Nación y en la Subsecretaría de Población del Ministerio del Interior. Desde diciembre de 1995 hasta julio de 1998, fue secretario de Educación y Cultura de la Municipalidad de Hurlingham.

Por Jesús Cornejo <br/> Ximena Linares Calvo

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