En Santa Fe, el río Paraná no da tregua

La probabilidad de lluvias en esta parte del Litoral provocó esta mañana una aceleración de los trabajos en las defensas de los distritos costeros cercanos a esta capital, donde el río sigue elevando su nivel y amenaza con inundar decenas de barrios en los distritos Colastiné y Arroyo Leyes.

El hidrómetro del dique dos del puerto local señala una altura de 6,48 metros, superando ampliamente el nivel de los 5,70, cuando comienza a implementarse la etapa evacuación del Plan de Inundaciones. En doce horas, el río creció 4 centímetros. Como sigue descendiendo en el norte (en Reconquista bajó 3 centímetros), se espera que en las próximas 72 horas comience a estacionarse frente a la costa capitalina. Pero si los pronósticos de lluvias se concretan, aparecerán nuevas dificultades, que evalúan actualmente los grupos técnicos del municipio.

Hay, según cifras oficiales, 392 personas evacuadas, que reciben asistencia municipal en refugios construidos especialmente para estos casos. Hay un monitoreo permanente de la salud de esa población en riesgo. Ya se encuentran cerradas las compuertas en las distintas estaciones de bombeo y están activados los puntos de bombeo de acuerdo a los protocolos para esta altura del río.

Hacia el sur, preocupa el rápido ascenso del Paraná frente a la ciudad de Rosario. Si bien entre anoche y esta mañana el nivel se estacionó en 5,15 metros, Gonzalo Ratner, subdirector de Defensa Civil del municipio rosarino, explicó que en la tercera semana de enero se espera el pico de la crecida, que será de 5,90 según el Instituto Nacional del Agua (INA). El descenso del agua será lento y dependerá de la lluvia que caiga en la región. "Rosario tiene un sólo punto vulnerable, que es (el barrio) El Mangrullo", recordó.