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SANTIAGO DEL ESTERO.- Era la última oportunidad; el tercer intento por alcanzar una corona mundial. Y Juan Domingo Córdoba no podía dejarla pasar, como lo hizo cuando cayó con Humberto La Chiquita González y con Chatchai Sasakul. Era la ocasión soñada frente a su gente. Y fue nomás la vencida para este santiagueño de 25 años que desde anoche es el campeón de los minimoscas de la organización Mundial de Boxeo. Triunfo por puntos, en fallo unánime, frente al mexicano Melchor Cob Castro, hoy ex monarca por no poder controlar esa endiablada derecha rival que abrió la puerta para que se le escapase el título.
En el estadio del Club Ciclista Olímpico de La Banda se coronó al vigésimo monarca mundial argentino. Con tarjetas que con justicia premiaron el trabajo tan esforzado como bueno de Córdoba. Para la estadística quedará el fallo del jurado: José Rivera, de Puerto Rico, dio un ajustadísimo 115 a 114; Roque García, de Colombia, 116 a 112, y Antonio Bernardo Soares, 117 a 115. Números que ingresan en la historia del boxeo nacional.
Córdoba logró el título en una categoría hasta ahora esquiva para los boxeadores locales. Roto el maleficio, forma el triángulo de campeones actuales junto con Marcelo Domínguez (crucero del CMB) y Carlos Salazar (mosca de la OMB).
Córdoba sabía bien que sus posibilidades disminuirían en cada round ido; mucho le costó no superar el límite de los 49 kilos y ese sacrificio en la lucha con la balanza siempre se paga sobre el ring. Por eso no sorprendió la atropellada en los primeros asaltos, cuando buscó imponer un trabajo desde larga distancia, con la derecha en procura de anticipar la punzante izquierda del campeón mundial. Le dio resultado en los primeros tres asaltos; por más que no consiguió desbordar al mexicano, experimentado y con fundamentos técnicos aprendidos de memoria, ese constante avance le hizo ganar respeto en un rival que se tomó un buen tiempo de estudio.
Pero, por algo Cob Castro llegó aquí como dueño de la corona de los minimoscas; astuto para no entreverarse en el alocado intercambio de golpes propuesto por el retador, esperó por su momento; lo encontró a partir del cuarto round, cuando Córdoba ya no tenía tanta resistencia para lanzar sus puños en forma permanente y abandonaba la iniciativa. En el quinto, el pugilista local cayó como consecuencia de un golpe bajo, pero pareció más un búsqueda del descanso que ya necesitaba.
Claro que la arremetida del mexicano duró poco y fue tan ineficaz como demoledora de sus propias reservas físicas. Apenas dos asaltos duró la ofensiva de Cob Castro, el tiempo requerido por Córdoba para cambiar el aire y envalentonarse otra vez apoyado por el público, que hizo sentir la presión local, aunque no llenó el estadio.
En el séptimo round se observó el mejor trabajo del santiagueño, recuperado y de nuevo en control de la distancia del combate. Su derecha partió con velocidad en esos tres minutos y un par de combinaciones acertadas hicieron retroceder a Cob Castro. Sintió esos golpes el mexicano, sin dudas.
Dejó el banquito para encarar el octavo sin mucha convicción y recibió otra serie de golpes que empezó a desnivelar la pelea. Bien Córdoba con la derecha, se repite; esa mano enviada como anticipo martirizó a quien por esos momentos sentía en peligro su reinado en la OMB. Quedaba el último tercio del combate...
La incertidumbre masiva tenía su eje en cómo respondería Córdoba en los últimos asaltos. Pero despejó el santiagueño las dudas con una demostración de guapeza, condición natural para ser campeón mundial, y con esa táctica armada por Amílcar Brusa, con esa mano derecha que controló todo intento del mexicano y que lo llevó a la coronación que esperaba. Sí, para Córdoba, la tercera fue la vencida...
MAR DEL PLATA.- El invicto mendocino Pablo Chacón, campeón del Mundo Hispano, venció por KO en el cuarto asalto al venezolano Angel Rivas, y obtuvo el título latinoamericano de los plumas, en un combate realizado en el Club de Quilmes.
Chacón, de 22 años, campeón del Mundo Hispano, no sólo sumó un nuevo lauro, sino que elevó su registro a 18 peleas ganadas, quince de ellas antes del límite.
En la misma reunión, el ex campeón sudamericano de los livianos el cordobés Pablo Sarmiento venció por puntos al bonaerense Rubén Astorga, y el local César Leiva le ganó por KOT en el 8º asalto al porteño Carlos Montañez.




