Emiliano Grillo fue segundo en Hilton Head y quedó a cuatro golpes de Stewart Cink

La carrera de Emiliano Grillo está impregnada desde hace un buen tiempo con la frase “Persevera y triunfarás”. Podrá frustrarse por momentos, quedará atrapado a veces en su implacable autoexigencia, pero no se puede negar que sigue empujando y cada vez está más cerca de conseguir su segundo título del PGA Tour, tras haber obtenido su único lauro en Napa, California (2015), siendo un debutante en el circuito.

El segundo puesto que logró el chaqueño en el RBC Heritage de Hilton Head tiene mucho valor, sobre todo desde el punto de vista emocional. A diferencia de otros torneos recientes en los que peleaba la vanguardia y se desbarrancaba en los últimos tramos, esta vez recortó distancias todo lo que pudo respecto de Stewart Cink, ganador de punta a punta (265, -19) y que había comenzado la última vuelta con 5 golpes de ventaja respecto de Collin Morikawa. La misión de tumbar al norteamericano de 47 años era muy complicada y Grillo se mantuvo al acecho, con un final de 68 (-3).

El leaderboard indica que el chaqueño terminó a 4 del campeón, y su sentimiento es de satisfacción. “Me voy feliz por haber terminado segundo, de ser el primer perdedor, es una semana que hay que tomar lo positivo y seguir adelante”, señaló el jugador surgido del Chaco Golf Club, que subió hasta el 36º puesto en el Ranking de la FedEx Cup y que atesoró su tercer top 10 de la temporada; los otros dos fueron en Corales Punta Cana (6º) y en el Mayakoba Golf Classic de México (8º). Además, un bonus que es otro aliciente: se clasificó para el PGA Championship, uno de los Majors del año.

Se esperaba un colapso de Cink que nunca llegó. En diálogo continuo con su hijo Reagan, que le hizo de caddie, el campeón del Abierto Británico 2009 se dedicó a administrar una ventaja y no arriesgó demasiado. Su vuelta de cierre fue discreta (70, -1), pero las dos rondas iniciales de 63 (-8), le dieron el colchón suficiente para que los últimos 18 hoyos fueran un paseo triunfal. Solo era cuestión de no cometer errores y apenas se equivocó con un bogey en el 12.

En tanto, Grillo -figuraba a seis golpes en el comienzo del día- aceleró en el trayecto de ida (birdies en los hoyos 2, 5 y 7), solo se frenó con el bogey del 12 y bajó el par 4 del 16, al embocar desde fuera del green. En el último hoyo salvó un par vital para conservar el segundo lugar y quedar igualado en esa posición con Harold Varner III. “Lo único que lamento son los tres putts en el 12, el único de la semana, hubiera sido un récord para mí no hacer greens de tres putts en todo el torneo, pero eso habla de lo sólido que jugué y estoy feliz”, comentó Grillo, que fue escolta por cuarta ocasión en sus seis temporadas en el PGA Tour; la última se dio en el CIMB Classic (Malasia), en octubre de 2018.

“Fue una semana de mucho trabajo, di todo lo que tenía, pero Stewart jugó muy bien, así que tendré que seguir buscando mi segunda victoria. De todas maneras, me llevo buenas sensaciones, el chip en el 16, los dos putts que metí en el 17 y 18, son cosas positivas para cuando uno está en la pelea, el tema es que Stewart se equivocó poco”, cerró el jugador de 29 años, que representó durante el amateurismo a la Asociación Argentina de Golf.

Cink, recordado por haberle ganado un desempate a un veterano Tom Watson en Turnberry 2009, gesta que significó su último Major, sumó su octava victoria en el PGA TOUR en 610 participaciones desde que llegó al PGA Tour en 1997. Y es el segundo jugador en conseguir dos victorias en este 2021, lo que lo lleva hasta el tercer lugar en la FedEx Cup. El telón de su consagración fue soñado: todos los integrantes de su familia, unidos en un abrazo.

El birdie de Grillo en el hoyo 7

Lo mejor de Grillo: emboca desde afuera del green del 16