Caso Rubiales: la selección masculina también se refirió a la polémica por el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso

El beso forzado que el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, le dio a la jugadora Jenni Hermoso tras la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda que conquistó la selección ibérica, sumó otro capítulo este lunes, con la opinión de los colegas varones de la futbolista.

La selección española masculina de fútbol, a través de un comunicado, se refirió a lo sucedido con Rubiales. ”Queremos rechazar lo que consideramos unos comportamientos inaceptables por parte del señor Rubiales, que no ha estado a la altura de la institución que representa”, leyó el delantero Álvaro Morata en una declaración realizada en nombre de toda la selección.

Morata estuvo acompañado por los otros tres capitanes de la selección (Rodri Hernández, César Azpilicueta y Marco Asensio), y leyó el escrito de apoyo a la selección femenina de fútbol -cuyas integrantes renunciaron en forma masiva como repudio- antes de iniciar el entrenamiento vespertino de la Roja este lunes, en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, cerca de Madrid.

“En primer lugar, queremos trasladar, una vez más, nuestro orgullo y nuestra más sincera felicitación a la selección femenina por el título de campeonas del Mundo en Sídney. Un hito histórico cargado de significado que marcará un antes y un después en el fútbol femenino español, inspirando a muchísimas mujeres con un triunfo de valor incalculable. Por ello, queremos lamentar y expresar nuestra solidaridad con las jugadoras que han visto empañado su éxito”, expresó Morata.

Y añadió: ”Queremos rechazar lo que consideramos unos comportamientos inaceptables por parte del señor Rubiales, que no ha estado a la altura de la institución que representa. Nos situamos de manera firme y clara del lado de los valores que representa el deporte. El fútbol español debe ser motor de respeto, inspiración, inclusión y diversidad y debe dar ejemplo con sus conductas tanto dentro como fuera del campo”.

La declaración de la selección masculina pone más presión sobre Rubiales, que el 20 de agosto suscitó una indignación internacional al besar en la boca a la jugadora Jenni Hermoso en la entrega de medallas en el estadio de Sídney. En una asamblea de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Rubiales afirmó que el beso había sido “consentido” y se negó a renunciar, tras lo cual fue suspendido por 90 días por la FIFA, que le abrió un expediente disciplinario por el caso.

En España, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) también le ha abierto un expediente de oficio y el gobierno español le ha solicitado que suspenda también a Rubiales, aunque el dirigente continúa aferrado a su cargo. Tras la declaración, los jugadores de la selección pidieron concentrarse a partir de ahora “en cuestiones deportivas, ante la relevancia de los retos que tenemos por delante”. La selección masculina se mide el viernes contra Georgia y el martes de la semana próxima frente a Chipre, en dos partidos cruciales con vistas a la clasificación para la Eurocopa 2024.

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