Escándalo en Atlético Tucumán: un dirigente renunció luego de que se viralizara un video suyo en la despedida de Riquelme, con una bandera en la mano

La despedida de Juan Román Riquelme tuvo un coletazo inesperado en la noche del lunes. Ocurre que se viralizó una imagen en la Bombonera, en donde se ve a Miguel Abbóndandolo, vocal titular de Atlético Tucumán, sonriendo y con una bandera de Boca en la mano. Ante esa situación, el directivo presentó su renuncia ante la Comisión Directiva.

“Mi hijita, de 7 años, me venía pidiendo ir a ver a Messi. Ella ni sabe quién es Riquelme. Ella quería ver a Messi. Quizás era la única oportunidad que tenía para llevarla. Cuando vino a Santiago del Estero y Buenos Aires no pudimos ir y en los partidos de Eliminatorias es más complicado”, explicó . Y agregó: “Estaban repartiendo banderas (de Boca) y ella quería una. Como era muy pesada la agarré yo. Es todo lo que hicimos”, detalló el responsable del fútbol profesional del club tucumano en diálogo con La Gaceta Play.

Poco antes de su renuncia, un socio ya había solicitado por escrito su destitución. El pedido lo había presentado el socio Luis Roberto Pons, quien se enfocó en un contexto que dejaba a Abbondándolo en una situación incómoda: mientras él hacía flamear la bandera de Boca, Atlético Tucumán se aprontaba para jugar un partido clave en la lucha por escapar de la zona baja de la tabla de la Liga Profesional.

En relación con eso, el dirigente expuso que se retiró de la Bombonera antes de que termine el partido homenaje al ídolo del “xeneize” para poder ver el partido del Decano (cayó 4 a 1 contra Sarmiento en Junín y ocupa el puesto 24 sobre 28 equipos). “Yo no iba a viajar a Junín porque estaba sin vehículo. Mi familia está radicada en Buenos Aires. Fui a todos los partidos de local y de visitante, salvo ante Colón y otro en Córdoba. Me fui del estadio cuando comenzó el segundo tiempo para ver el partido con Sarmiento, que comenzó más tarde. Y el lunes estuve con el plantel antes de que vuelvan a Tucumán. Estuve en todos y hablo todos los días con el técnico (Lucas Pusineri)”, explicó.

“No soy hincha de Boca, soy de Nueva Chicago porque estuve gran parte de mi vida en Villa Madero, que es a pocas cuadras de la cancha. Si con lo que hice el domingo le pude sacar una sonrisa a mi hija, que bastante mal la pasa en el día a día (la esposa del directivo cuestionado está atravesando un grave problema de salud), bienvenido sea. Pido disculpas si ofendí a alguien”.

Sobre el pedido de destitución que presentó un socio, Abbóndandolo resumió: “Los dirigentes somos siempre el chivo expiatorio. Cuando las campañas son buenas, todo es mérito de los jugadores y del técnico. Cuando las campañas son malas, la culpa es de la dirigencia”.

El pedido de destitución

El texto enviado por Luis Pons a la entidad tucumana comienza: “Solicito destitución y derecho de admisión al estadio al socio Miguel Abbóndandolo. Que en virtud de los hechos protagonizados, el día 25/06/2023 en la cancha de Boca Juniors en el partido despedida de Juan Roman Riquelme, por el Socio y miembro de la H.C.D. Vocal Titular 2° MIGUEL ABBONDANDOLO, el cual fue tomado por las cámaras de televisión de la transmisión del evento “flameando” una bandera azul y oro en las tribunas tal cual lo haría un hincha de esa institución deportiva, siendo además que en horario paralelo al evento, nuestro primer equipo disputaría un partido de vital importancia por el campeonato contra Sarmiento de Junin”. Pons se presenta como “Abogado, Socio Activo del Club Atlético Tucumán”.

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