Servini convocaría a la Asamblea si el Comité de Regularización no lo hace antes del 30

Luego de requerirle al Comité de Regularización que llame a Asamblea antes del 30 de diciembre, la jueza federal María Servini espera en su despacho la convocatoria del órgano que gobierna la AFA. Quienes la visitan dicen que está "convencida" de que el fútbol argentino tiene que elegir presidente cuanto antes. Pero la crisis económica que ahora también afecta a los clubes de primera división parece haber alterado las prioridades: en el edificio de la calle Viamonte se habla más de números que de institucionalidad. Nadie sabe cómo se pagarán los sueldos de diciembre. Mucho menos, cuándo se llamará a Asamblea.

Por lo tanto, en los despachos judiciales manejan un plan B: hacer la convocatoria a Asamblea desde el propio juzgado; una Asamblea en la que todos sus integrantes tienen mandatos vencidos. Una Asamblea que refleja el estatuto viejo de la AFA, y en el que no está contemplada la representatividad de los llamados "grupos de interés", como el fútbol femenino, el futsal, el fútbol playa, los futboistas, los entrenadores y los árbitros.

"Sería un abuso de autoridad por parte de la jueza. Y la AFA se expondría a sanciones severas de la FIFA", admite una fuente judicial que conoce el expediente madre que maneja Servini: la denuncia de la legisladora porteña Graciela Ocaña por la ruta del dinero del Fútbol Para Todos.

El Comité de Regularización jugó ayer su propia carta para evitar la injerencia judicial en los asuntos del fútbol: presentó un recurso de revocatoria contra el requerimiento del llamado a Asamblea antes del 30 de diciembre. El escrito remarca cuáles son los objetivos del órgano: administrar el día a día de la Asociación, reformar los estatutos y, luego, llamar a elecciones. La idea de quienes gobiernan la AFA era que la Justicia se expidiera sobre este recurso a corto plazo. Y, de esta manera, quedara suspendido el llamado a Asamblea y advierte sobre el futuro. De hecho, el Comité le recuerda a la jueza que las asociaciones integrantes de la FIFA (y los clubes que formen parte de ellas, como Argentino de Quilmes) deben recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo y no a la Justicia ordinaria para dirimir sus disputas. Es decir, para el órgano que gobierna la AFA, no es competencia de Servini definir si el recurso presentado por el club quilmeño (y firmado por otras 30 entidades) es procedente o no. El escrito, al que tuvo acceso LA NACION, dice que la presentación de Argentino de Quilmes entraña un desconocimiento total del estatuto de la AFA. En el edificio de la calle Viamonte confían en que la revocatoria presentada abortaría el pedido de la jueza. Además, creen que el asunto ni siquiera es competencia de un juez federal, como Servini, sino de uno civil.

Mientras los días pasan sin que la AFA llame a Asamblea, la FIFA decide qué hará con el estatuto nuevo. Estaba previsto que el abogado español Jorge Mowinckel Sagnier viajara en estos días a la Argentina para entrevistarse con Servini y conocer "de primera mano" su pensamiento con respecto al fútbol. Sin embargo, desde Zurich decidieron postergar el vuelo para los primeros días de enero. Hacerlo ahora hubiera significado una especie de "reacción" ante el requerimiento que le hizo la jueza a la AFA. La FIFA vendrá recién en enero.

Y sólo a mediados del mes próximo o principios de febrero girarán el borrador definitivo del nuevo estatuto. "No estará antes", aseguraron las fuentes consultadas. Ese correo electrónico con la versión final del estatuto será el puntapié para una nueva discusión. Los clubes deberán analizarlo (hay quienes piensan que la FIFA modificará la representatividad y que disminuirá la cantidad de miembros de la nueva Asamblea) y deberán aprobarlo con el voto afirmativo de 60 asambleístas (el 80% de los integrantes del cuerpo). Recién en ese momento, con el estatuto aprobado, el Comité de Regularización quedará habilitado para llamar a elecciones, porque habrá cumplido con todos los requerimientos pedidos por quienes le confirieron el poder: la FIFA y la Conmebol.

Justamente la Conmebol firmó ayer en Asunción (Paraguay) un documento de apoyo al Comité de Regularización que encabeza Armando Pérez. Lo rubricaron todos los presidentes de las asociaciones nacionales, y se hizo durante la reunión del consejo previa al sorteo de la Copa Libertadores del año próximo.

De todas maneras, la AFA enfrenta un escenario impredecible: debe resolver el frente institucional y la crisis económica en tiempo récord. En relación a la escasez de dinero, continuaron ayer los contactos entre Javier Medín (número 2 de la AFA) y funcionarios del gobierno. El objetivo es poder destrabar la partida de $ 350 millones para hacerle frente a la cuota de diciembre de los derechos de TV. "Estamos negociando la fórmula para que el dinero esté. Quizá salga un monto en diciembre y otro en enero. Estamos viendo cómo lo armamos", contó alguien al tanto de las charlas sobre el tema.

A esta hora, la AFA sabe que ya no habrá más Fútbol Para Todos a partir de enero. Y todavía no cerró el nuevo contrato televisivo para 2017. Tampoco aparecen los $350 millones. Y los clubes no saben cómo hacer frente a sus compromisos.