River sacó adelante un partido complicado, ganó 2 a 1 y es líder de su grupo en la Copa Libertadores

River edificó un triunfo más que importante para treparse a lo más alto de las posiciones del grupo D de la Copa Libertadores.

El 2 a 1 sobre Junior en el Monumental (goles de David Martínez, Julián Álvarez) fue mucho más complicado y trabajado que la clara superioridad que se vio en la última media hora. Porque el equipo visitante le jugó de igual a igual durante toda la primera etapa a los dirigidos por Marcelo Gallardo.

Pero a los 23 minutos se dio un momento bisagra en el partido. Porque en un ataque de Junior por izquierda, Borja fue tomado por David Martínez afuera del área, quien recién lo soltó dos metros adentro. Era penal. Clarísimo. Sin embargo, árbitro paraguayo Juan Benítez no lo sancionó, ante el lógico reclamo de todo el conjunto colombiano. Incluso, en esa misma jugada pudo haber sido expulsado el hombre de River, por la ley del último recurso. Nada de eso ocurrió.

Paradojas del fútbol, el mismo Martínez estampó el 1 a 0 para el Millonario apenas seis minutos más tarde. Fue luego de una serie de rebotes que nadie parecía poder dominar.

Esos dos mazazos (la no sanción del penal a favor y el gol recibido) astillaron las esperanzas de Junior. Que igual intentó mantenerse en partido.

Hasta que llegó el golpe de nocaut. Fue a los 10 minutos del complemento, cuando Álvarez se anticipó a su marca y anotó el segundo. Poco antes, el palo se lo había negado a Borja.

Con ese tanto, Junior se terminó de derrumbar. Aún conmovido por el penal a favor no sancionado y el 0-1, remontar dos goles de diferencia se le hizo demasiado cuesta arriba al conjunto colombiano. Y River aprovechó para buscar más ventaja. Lo tuvieron Montiel y Girotti, pero salvó Viera.

Sobre la hora, Borja tuvo su premio al anotar el descuento que decoró el resultado.

La figura de Benítez había quedado desdibujada temprano. A los 3 minutos, Borja fue con todo en el mediocampo sobre la integridad de Montiel, que recibió un topetazo a la altura de la mandíbula y quedó tendido en el césped. Pudo haber sido expulsión para el delantero, pero no recibió ni amarilla. Eso derivó en empujones y amenazas, de esas que quedan solo en miradas.

A los 17 de la primera etapa, Girotti hizo sacudir la red visitante con un fuerte derechazo desde el punto penal. Pero el tanto no valió, porque en la jugada previa Palavecino desvió con su mano derecha el remate desde lejos de De la Cruz. Lo curioso es que esta misma jugada será válida después del 1 de julio, cuando cambie esta regla puntual.

Como viene ocurriéndole con frecuencia, Armani padeció en cada jugada aérea. Dubitativo y falto de determinación, quedó varias veces desairado, poniendo en riesgo su valla.

Fue final y alegría para River, que se vio evidenciada en la sonrisa de oreja a oreja de Marcelo Gallardo. Su equipo es puntero junto a Fluminense, ambos con 4 unidades y la misma diferencia de gol.

Por la tercera fecha, el Millonario visitará el miércoles próximo a Santa Fe en Bogotá, mientras que Junior recibirá a Fluminense un día más tarde.