San Lorenzo tiene dibujada una sonrisa

SANTA FE.- A pesar de los 29 puntos que los separan en el torneo local y de la diferencia entre un plantel y otro, San Lorenzo sufrió bastante para avanzar en la Copa Argentina. En el primer tiempo estuvo desdibujado, pero en el segundo la cosa fue muy diferente. Edgardo Bauza puso en la cancha a Pablo Barrientos y asumió el protagonismo. La necesidad de ganar motivó la decisión del técnico, pero lo cierto es que se observó un gesto que permitió que se beneficiara el espectáculo. Así, el Ciclón se impuso por 1 a 0 a Rafaela y consiguió el pasaje a los cuartos de final.

Para San Lorenzo, las alegrías pueden continuar. No tienen freno a pesar de los contratiempos que pueden presentarle los partidos en sus comienzos. La esperanza sigue firme en el torneo de Primera División y en la Copa Argentina. La cita con Rafaela de anoche le agregó otro motivo para alegrarse, para festejar, pues no pierde desde el 19 de abril pasado, cuando cayó 1-0 con Aldosivi (10a fecha del torneo local).

Claro que, para conseguirlo, San Lorenzo tuvo que superar sus propias limitaciones, ésas que le imponía su propia actitud pasiva. De esta manera le ofreció a Rafaela el lugar para que generara los mejores contraataques y tuviera las situaciones más claras para abrir el marcador. Y lo que empezó siendo una demora para meterse en el partido, terminó por encender las alarmas en el equipo de Bauza.

Los dirigidos por Leonardo Astrada llevaron el juego al terreno de la presión. Fue por eso que se vieron muchos hombres de Rafaela en el medio cortando el juego de las camisetas azulgranas. El Malevo Ferreyra, cuando se mostró activo por la izquierda, inquietó con frecuencia a sus marcadores y acercó peligro al arco rival.

Con el ingreso de Pablo Barrientos en la segunda mitad, el Ciclón entendió que en el juego por abajo y por los costados estaba la clave para afirmarse. En ocho minutos, una buena jugada del recién ingresado terminó con una pelota de gol, en buena parte porque encontró a los centrales abiertos. Martín Cauteruccio, que tuvo que ingresar por una lesión de Nicolás Blandi, se encontró de frente a Werner y no falló; fue la apertura del marcador.

Mejor parado, San Lorenzo se dio cuenta de que podía explotar los espacios que encontraba en el medio. En salidas rápidas, preferentemente por el sector de Ortigoza y conducidas por Barrientos, se fueron dando oportunidades para los azulgranas que, a la hora de la definición, dejaron en evidencia la diferencia. El partido empezó a extinguirse en un recuento que les dejó a los de Boedo algo para replantearse y mucho por qué alegrarse.

El gol de Cauteruccio

Cauteruccio y el gol; siempre cumple. Martín Cauteruccio, autor del gol en Santa Fe, señaló: "Tenemos equipo para pelear todo. Estamos bien de la cabeza. San Lorenzo es candidato siempre. Es importante y necesitamos estar arriba en todos los frentes".

Ya son 14 sin perder y sigue de racha. El Ciclón acumula 14 partidos invicto (ocho victorias y seis empates), es líder en Primera División y avanza en la Copa Argentina.

Minuto de silencio con apoyo afectivo. Por el fallecimiento de Justino, hijo de Sebastián Torrico (reemplazado por Devecchi), hubo un minuto de silencio y el Ciclón posó con una bandera en respaldo.