Sorpresa: Arsenal vapuleó a Tigre y ratificó a Huracán en la Copa Libertadores 2023

Una noche de emociones, de las que quedan en el recuerdo. Tigre disputó un partido singular, entre el objetivo de ganar para sellar la clasificación para la Copa Libertadores y la despedida de Martín Galmarini, un futbolista que se inscribió en la historia del club. Una fiesta que estuvo preparada desde temprano en Victoria, aunque Arsenal resultó un visitante que desempolvó otros planes: en siete minutos destrozó el sueño del Matador, se impuso por 4-1 y consolidó a Huracán para disputar el máximo torneo continental de clubes. El Globo volverá a la cita después de cuatro años, mientras que para Tigre quedará el consuelo de participar en 2023 de la Copa Sudamericana.

El encuentro tuvo un comienzo con apariencia de homenaje. Porque hasta los 8 minutos, momento en que Galmarini fue reemplazado por Blas Armoa, Tigre y Arsenal jugaron a medirse, a estudiarse, a observar por dónde podían lastimarse. Las lágrimas invadieron al Patito desde el momento en que se formó la hilera para entrar al campo de juego: el regalo de la camiseta enmarcada -entregada por su pareja e hija-, el saludo con todos sus compañeros y los rivales, la secuencia de una película para el volante que también tuvo un paso por River y Atlante (México). A los 40 años, el registro señalará que fueron 393 partidos, con 20 goles y cuatro títulos. Cifras impactantes, de esas que demuestran que el lazo será eterno.

Lo mejor del partido

El pase de la cinta de capitán a Sebastián Prediger resultó el acto que determinó el nuevo escenario. Y Tigre, el equipo que debía marcar el pulso del juego, avanzó: con la plaza en la Copa Sudamericana asegurada, un triunfo lo catapultaba a la Copa Libertadores, desplazando a Huracán. Armoa, posicionado sobre la derecha, fue quien desbordaba a Arsenal; el reemplazante de Galmarini explotaba los movimientos de sus compañeros que generaban un espacio entre el zaguero Joaquín Pombo y el marcador lateral Damián Pérez.

Alexis Castro, Lucas Menossi, Facundo Colidio y Lucas Blondel –con sus trepadas- eran los nombres que se asociaban con Armoa para llevar riesgo sobre la valla de Alejandro Medina, que respondió con seguridad ante un remate de cabeza de Colidio y un disparo de Armoa. A Tigre le faltaba descubrir a Mateo Retegui, el goleador de la Liga Profesional, con 19 festejos. Cuando Colidio logró ubicarlo, el control del artillero fue defectuoso y la acción se diluyó.

Arsenal tiene un futbolista que saca conejos de la galera: Facundo Kruspzky. El N°10 es el que maneja los hilos de la ofensiva de un club que logró zafar del descenso y que para 2023 tendrá que rearmarse: el director técnico Leonardo Madelón dejará el cargo, también su futbolista estrella se alejará… Pero el conjunto de Sarandí no fue a Victoria para ser el partenaire de la fiesta que diseñaron los hinchas de Tigre y en siete minutos, entre los 37 y 44 del primer tiempo, generó una secuencia insospechada: Julián Navas intentó una pared con Kruspzky, pero el que devolvió involuntariamente la jugada fue el defensor Abel Luciatti; el volante, con el arco libre, definió ante el lamento del arquero Gonzalo Marinelli.

Tres toques consecutivos dejaron a Mauro Pittón en posición de remate. El santafesino observó adelantado a Marinelli y ejecutó por sobre el cuerpo del guardavalla que, en su desesperación por despejar, amortiguó la pelota que ingresó en cámara lenta al arco. No salía de su asombro Tigre, que Arsenal profundizaba la herida del rival: Kruspzky apareció por el sector derecho y habilitó a Apaolaza; el delantero anticipó a Brian Leizza y desvió la pelota, desairando a Marinelli.

Lejos de bajar la intensidad, Arsenal avisó con un nuevo remate de Pittón y cuando Tigre insinuó una reacción regresó a la escena Kruspzky. Recostado sobre la izquierda, aguantó la embestida de Blondel, engañó a Leizza y colocó la pelota entre la estirada de Marinelli y el palo derecho. Los aplausos de Madelón ratificaban la efectividad, mientras el Matador sufría en su área y también en la del rival: Retegui, Colidio y Sebastián Prieto no lograban quebrar la resistencia de Medina, hasta que Armoa, aquel que era sinónimo de desequilibrio en el comienzo, marcó el descuento. Lejos de la meta de máxima, los hinchas de Tigre aplaudieron la campaña y cantaron por un triunfo ante Racing, en el partido que clasificará a un equipo para medirse con Boca en el Trofeo de Campeones.

Tigre cayó después de 11 partidos y Arsenal volvió a festejar fuera de Sarandí luego de nueve juegos. Otra sorpresa que regaló la última fecha de la Liga Profesional..