El regreso del fútbol argentino podría demorarse otras dos semanas para que Turner ingrese en el negocio

La reunión fue el martes por la tarde en el Hotel Hyatt. Allí, Whit Richardson, jefe de nuevos negocios de Turner, y Víctor Roldán, vicepresidente de Asuntos Públicos de la compañía, hablaron con los gerentes operativos de la empresa, y con cinco abogados. El tema central fue el fútbol argentino. Hubo una decisión: en los próximos días, el Comité de Regularización de la AFA tendrá la oferta formal que tanto buscaba: $7500 millones por los próximos tres años del fútbol de primera división. Además, la empresa adelantaría un valor llave (un aporte inicial para ingresar en el negocio) que varía entre los $800 y los $1000 millones, y que servirá para que los clubes hagan frente a sus deudas.

Dos fuentes independientes y al tanto de las negociaciones confirmaron la reunión de ayer. Y adelantaron que este miércoles habrá otro cónclave importante. Esta charla de negocios definirá a los integrantes de la nueva sociedad que televisará el fútbol argentino. “Puede que Turner sea la cabeza del negocio, pero necesitan a los abonados de la televisión codificada. Si no, no es rentable”, cuenta un informante que conoce el mercado. Cablevisión y DirecTV concentran la amplia mayoría de los argentinos que pagan por contenidos televisados. Hacia ellos mirará Turner.

Sea cual fuere la respuesta, desde Atlanta (casa matriz de Turner) ya adelantaron que piensan “ir a fondo” por el fútbol argentino. En las negociaciones de los últimos meses sonó con insistencia el nombre de Torneos para hacerse cargo de la producción de los partidos. “Si eso no se cumple, Turner ya negocia por el 70% de La Corte (productora de los hermanos Monzoncillo y Cristóbal López que ya se encargaba del control central de las transmisiones del Fútbol Para Todos)”. Por esa porción de la empresa con sede en la calle Fraga, los estadounidenses pagarían cerca de US$8 millones.

El fin de semana pasado, una llamada telefónica a la sede central de Turner en Atlanta aceleró los tiempos. El interlocutor, funcionario del gobierno argentino, les dijo a los ejecutivos estadounidenses: “Si pueden, háganse cargo ya del contrato”. La decisión estaba tomada: el Gobierno argentino se iba del Fútbol Para Todos.

Según pudo reconstruir LA NACION, los ejecutivos de Turner imaginan dos escenarios posibles. Por un lado, les convendría que la primera división se plegara al cese de actividades anunciado por los clubes de ascenso. Eso le daría más margen de maniobra para negociar, firmar los nuevos contratos y, sobre todo, preparar la logística para hacerse cargo de los 15 partidos semanales. Si consiguen que la AFA rescinda con el Gobierno y firme con ellos, lo más probable es que hasta fin de año los partidos de fútbol se emitan por TV abierta, como hasta ahora. Y uno de los canales más favorecidos en el reparto de los encuentros sería Telefé. No es casual: Turner negocia desde hace meses quedarse con la señal de Telefónica. Si, en cambio, los partidos empiezan el 19 de agosto como está previsto, el Fútbol Para Todos macrista seguiría hasta el 1 de enero de 2017. Entonces sí, Turner podría hacerse cargo con toda su plataforma: un canal en el abono básico y otro en el pack de alta definición, además de un servicio por internet.

La idea de los empresarios es firmar un contrato de largo alcance con la AFA. “Originalmente se pensó en 20 años, pero ahora serían 15, cuentan quienes siguen la ronda de negociaciones. En este plan, la idea es formalizar AFA TV S.A., en la que la mayor participación accionaria sea de la AFA y el resto de la empresa estadounidense (70%-30% u 80%-20%). Entre el fútbol y Telefé, Turner está dispuesto a invertir ahora mismo cerca de US$ 500 millones.

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