Un final anunciado: sin respaldo y abatido, Madelón deja San Lorenzo

"Tranquilos muchachos. El martes hablamos", apenas atinó a decir Leonardo Madelón antes de partir del Nuevo Gasómetro. Palabras huidizas y esquivas de un técnico que ya estaba condenado. Su semblante era la evidencia viva de un hombre quebrado y sin fuerzas para continuar. Sólo le faltaba llorar. Un puñado de minutos antes, en la soledad del vestuario local, había presentado la renuncia a Carlos Abdo. Aunque la imagen que anticipó toda la película que luego rodó se produjo a los 43 del ST cuando, por primera vez en el partido, Madelón abandonó la línea de cal y se sentó en el banco de suplentes con el 0-2 de Vélez sentenciado . Fue casi una señal de su decisión.

Su dimisión, la séptima de una DT en ocho jornadas, fue aceptada de inmediato, aunque ningún dirigente se expresó en consecuencia en busca de un poco de serenidad.

Madelón ya forma parte del pasado de un Ciclón atormentado y desesperado que busca en Ricardo Caruso Lombardi a un salvador, más que a un entrenador. Un redentor al que los dirigentes fueron a buscar, con insistencia y sin reparos, desde que comenzó el torneo Clausura. ¿Los argumentos? Su reconocida condición de motivador y saca puntos . Con la negativa telefónica de Miguel Ángel Russo para reunirse esta mañana, en la vorágine de la tarde de ayer, todas las miradas volvieron a posarse sobre el actual DT de Quilmes.

Lo cierto es que Aníbal Fernández, el presidente cervecero, se opone terminantemente y sólo ofrece una vía de escape. Una salida que dejaría mal parado a Caruso. Para que ello se cristalice, el polémico DT deberá asumir en primera persona que acepta el ofrecimiento del Ciclón. Conocedor de los golpes de efecto y hábil en la jungla política, Fernández pretende evitar pagar el costo político y deportivo ya que la institución del sur marcha cuarta ( está en zona de Promoción por un ascenso ) cuando restan doce fechas para terminar la B Nacional. Aunque, es cierto, el envión de un tiempo atrás quedó frenado producto de cuatro empates consecutivos. Esta tarde, Caruso podrá palpar en carne propia el termómetro cuando su Quilmes reciba a Aldosivi. Un tema no menor para San Lorenzo, también ahogado financieramente, será conseguir dinero fresco para el resarcimiento económico para Quilmes.

Otras opciones son Blas Armando Giunta, que hace tiempo tiene ganas de finalizar su ciclo en Almirante Brown, Reinaldo Merlo y Rubén Darío Insúa. Por caso, nombres con menos fuerza y efecto que el que proporciona el mediático Caruso Lombardi.

El estado de confusión es tan amplio en Boedo que en la semana, mientras Madelón preparaba el cotejo ante Vélez, los dirigentes conversaron con Esteban González, técnico de las inferiores, y con Rodolfo Veira, asesor del presidente. El Bambino, héroe de antaño, evade el compromiso y, cómodo, prefiere quedarse en su rol de comentarista radial.

El 0-2 que el Fortín le propinó a San Lorenzo produjo algo muy parecido a un cisma definitivo para un elenco sin poder de reacción y con el fantasma del descenso cada vez más cerca.

Trece partidos, cuatro del Apertura, ocho del Clausura y uno por la Copa Argentina donde se impuso en apenas tres, empató cuatro y perdió en seis oportunidades. Lapidario resumen del tiempo de Leo Madelón en Boedo que dejó al conjunto azulgrana en zona de Promoción y muy complicado para lo que viene. Los constantes cambios que hizo el ex camboyano sumados al apoyo ambivalente de los dirigentes echaron por tierra su suerte. Si algo le quedaba.

Infructuosos resultaron los constantes mensajes elípticos que envió en su deseo de revertir la debilitada situación del Ciclón. "Yo estoy tranquilo y los muchachos también", "La continuidad depende de los resultados", "Ni se me cruza por la cabeza perder", "No quiero lastimar a San Lorenzo", fueron algunas de sus frases en su corto paso como entrenador. Apoyado por la mayoría de los referentes del plantel encabezados por Jonathan Bottinelli, quien ayer, por una lesión, vivió el partido desde la platea de un estadio vacío, lugar donde se trenzó en una disputa dialéctica con periodistas partidarios que insultaban a Leo durante todo el encuentro.

Todo en el día del 104° aniversario del Ciclón. Un cumpleaños que todo San Lorenzo quiere olvidar mientras aguarda por un milagro llamado Caruso Lombardi.

Así están las posiciones del torneo Clausura