Aryna Sabalenka, Nick Kyrgios y una versión exótica de la “Batalla de los Sexos”
La número 1 y el australiano jugaron en Dubai un cotejo con reglas particulares
5 minutos de lectura'
Hace más de medio siglo, Billie Jean King se hizo leyenda al ganarle una “Batalla de los Sexos” a Bobby Riggs, un excampeón de Wimbledon que hacía comentarios misóginos en la televisión. Aún hoy, 52 años después, es un encuentro histórico que no encontró el mismo suceso, o al menos ese carácter épico, en las sucesivas remakes. La “Batalla” tuvo otro capítulo que protagonizaron este domingo el australiano Nick Kyrgios, exnúmero 13 y actualmente 671° del ranking mundial de la ATP, y la bielorrusa Aryna Sabalenka, número 1 de la WTA, en Dubai, ante unos 17.000 espectadores.

Kyrgios, de 30 años, finalista de Wimbledon 2022, pero casi inactivo en las últimas dos temporadas, le ganó a Sabalenka por 6-3 y 6-3, en una exhibición que tuvo un par de licencias reglamentarias: se jugó en un court modificado, ya que el lado de la bielorrusa era un 9 por ciento más pequeño para emparejar las diferencias de velocidad -de acuerdo con un estudio previo sobre los desplazamientos de hombres y mujeres en el tenis-, y no había segundos servicios.
Sabalenka, pese a la derrota, expresó su satisfacción porque entendió que la exhibición le sirvió como un entrenamiento, ya que “contra un hombre se juega un tenis muy diferente, todo es mucho más rápido”, más allá de que muchas de sus colegas del circuito tienen peloteadores (sparrings) varones.

“Me sentí genial. Creo que di una gran pelea. Él estaba pasando apuros, se cansó muchísimo. Creo que el nivel fue muy alto, pegué muchos tiros hermosos, subí mucho a la red, jugué pelotas cortas. Lo disfruté mucho”, aseguró Sabalenka, que dejó en claro que quiere una revancha. “La próxima vez que lo enfrente ya conoceré sus tácticas, sus fortalezas y debilidades, y sin duda será un partido mejor. Me encanta ponerme a prueba y me encantaría volver a enfrentarlo”, destacó la líder del circuito femenino.
Del otro lado, Kyrgios elogió a Sabalenka por quebrarle el servicio “un par de veces” y la ponderó como “una gran luchadora. No me consideraría el campeón esta noche. Ver a alguien tan grande como Aryna aquí y a mí... es realmente un espectáculo”.

“Obviamente estaba nervioso, no creo que mucha gente hubiera levantado la mano para estar en mi lugar. Fue un partido reñido, uno del que todo el mundo ha estado hablando durante los últimos seis meses. Hubo quiebres en ambos lados, podría haber ido para cualquiera de los dos. Creo que esto es un gran paso para el tenis”, admitió Kyrgios, que en 2025 sólo jugó cinco encuentros, con un triunfo y cuatro derrotas, y su último cotejo oficial fue hace más de nueve meses, el 21 de marzo pasado, por la segunda rueda del Miami Open, una caída ante el ruso Karen Khachanov.
Si el objetivo era conformar un espectáculo sin ahondar en la parte competitiva, se cumplió. Se trató de un típico encuentro de exhibición, lejos del condimento vinculado a la lucha por la igualdad de género que King impulsó en 1973 en aquel cotejo jugado en el Astrodome de Houston. No hubo tensión, sí risas y bromas entre ambos jugadores; Kyrgios ensayó algunos de sus saques de abajo, y hubo un par de puntos lucidos por parte de la bielorrusa frente a la multitud en el Arena de Dubai, donde las entradas más caras se vendieron por casi 800 dólares.
Sabalenka SMOKES the winner past Kyrgios 😮💨 pic.twitter.com/sDvpo3qucj
— Tennis Channel (@TennisChannel) December 28, 2025
Disminuido por lesiones en una rodilla y una muñeca, que requirieron operaciones, Kyrgios pareció jugar sin movilizarse en exceso, más allá de la desventaja que suponía el hecho de que la mitad en la que jugaba Sabalenka era algo más pequeña, en un curioso intento por nivelar el campo de juego. El australiano estaba empapado en sudor cuando aseguró la victoria en su tercer match-point, y ambos sonrieron cuando se abrazaron en la red.
En todo caso, la elección de Kyrgios para disputar este encuentro ya había generado cierta controversia, ya que hace algunos años se declaró culpable de empujar a una exnovia al suelo durante una discusión -evitó la condena por un cargo de agresión común- y anteriormente había dejado en claro su oposición a la igualdad salarial en el tenis. Pero el australiano y Sabalenka comparten espacio en Evolve, la agencia de representación a la que pertenecen, y que estuvo a cargo de la organización de este partido.

Respecto de aquel duelo de 1973, cuando la WTA recién daba sus primeros pasos, la situación es ahora muy diferente, con un tenis femenino sólidamente asentado y que ha conseguido equiparar los premios en los principales torneos. En este contexto, el interés del partido fue limitado, ya que Kyrgios dominó claramente, e incluso se permitió algunos momentos de diversión. No faltaron algunas críticas. La francesa Alizé Cornet, con pasado como número 11 del tour, dijo en RMC Sport: “Creo que es una gran maniobra publicitaria, la verdad. Me da la impresión de que todo es publicidad y que el juego en sí solo queda en un segundo plano. Estas reglas, sobre todo la de acortar la pista para Sabalenka, me parecen una auténtica estupidez. No da una buena imagen del tenis femenino”.
“Me gustaría preguntarle a Sabalenka: ¿Por qué aceptó reducir el tamaño de la cancha cuando lleva dos años como número 1 del mundo? Ella puede jugar en una cancha normal contra Kyrgios. Todos sabemos que los hombres y las mujeres del más alto nivel pueden jugar juntos desde la línea de fondo. Esto realmente disminuye y devalúa las habilidades de Aryna, que podría ser una fuerte rival para Kyrgios desde la línea de fondo, especialmente porque está casi retirado", amplió Cornet.
Otras noticias de Tenis internacional
1Batalla de los Sexos: los principales duelos de la historia
- 2
United Cup 2026: grupos, fechas, horarios y todo lo que hay que saber
3La United Cup en Australia, el primer torneo de tenis de 2026, con Argentina como protagonista
4Sabalenka le pone pimienta a “La Batalla de los Sexos” contra Kyrgios y crece la polémica por el impacto del resultado



