Roland Garros: Nadia Podoroska venció a Anna Karolina Schmiedlova y se clasificó a los octavos de final

El fabuloso cuento de hadas que está protagonizando Nadia Podoroska en Roland Garros no se termina: le ganó por 6-3 y 6-2 a la eslovaca Anna Karolina Schmiedlova, en una hora y 39 minutos, y ya se ubicó en los octavos de final del último Grand Slam del año. Un increíble presente, quizás inimaginable hasta para la rosarina hace unos meses. Pero no hay tiempo para detenerse en el pasado: su próxima rival surgirá de la checa Barbora Krejcikova (114ª) y la búlgara Tsvetana Pironkova (157ª).

Esta campaña de Podoroska, la mejor por lejos de su carrera, revitaliza al tenis femenino nacional y las estadísticas toman cada vez más color. De hecho, la última argentina en alcanzar los octavos de final de un torneo de Grand Slam había sido Gisela Dulko, que cayó en esa instancia ante Marion Bartoli en Roland Garros 2011. Con este triunfo, la jugadora de 23 años, formada en el Club Atlético Fisherton, se garantizó el acceso dentro del top 100 del ranking mundial (quedará cerca del 89º puesto) y a la vez se autogenera un colchón lo suficientemente importante como para conservar la plaza para los Juegos Olímpicos de Tokio, postergados para 2021.

Cómo fue la victoria

La argentina comenzó a paso firme e impuso su dominio desde el comienzo con dos quiebres para ponerse 4-0 en apenas 30 minutos. La confianza y la fortaleza en su juego fueron en aumento, muy segura para encontrar los espacios y someter a la eslovaca.

Schmiedlova, empezó a agarrar ritmo, logró quebrar el saque de la rosarina, y así acortó la diferencia por 3-4. Fue ahí cuando un resbalón de la jugadora europea, que se raspó la rodilla, provocó que el partido se viera interrumpido largos minutos. La tardanza de las médicas para la curación de la herida incomodó a Podoroska, que optó por abrigarse y realizar movimientos de calentamiento con el objetivo de no enfriarse.

Sucedió que debido a los nuevos protocolos médicos, la pausa se extendió ya que se desinfectaron todos los insumos. Finalmente, tras la reanudación, la argentina defendió su saque y quebró para llevarse el primer set del encuentro por 6-3 en 65 minutos.

En el segundo set, más allá de que hubo una sucesión de quiebres de uno y otro lado, Podoroska pudo mantener su ritmo y se mostró superior a la eslovaca. Sobre todo, fue precisa con sus golpes y manejó muy bien los momentos de nerviosismo. Si de repente no le salían las cosas, enseguida se rearmaba mentalmente y se encarrilaba en su juego, al tiempo que provocaba el error en la rival. De esta forma, ya está entre las 16 mejores de la cita parisina, un sueño que ahora es realidad.

En agosto, en la reanudación del circuito, Podoroska había competido en el WTA de Palermo (superó la clasificación y cayó en la primera ronda). Perdió las finales del 125K de Praga e hizo ruido en Saint-Malo, Francia, ganando el trofeo en un Women's de 60.000. El último 14 de septiembre, un día después de obtener el título en Francia, llegó a su mejor ranking histórico: 130°. Ahora, el horizonte es todavía mucho más prometedor.